Tomado de Televisión de Galicia
Irene Ventura, saliendo de su casa con su perrita "Noa".
Foto: Captura del vídeo
Fue un vecino el que presentó la denuncia alegando incumplimiento de las normas internas de la comunidad. Pero la afectada dice que los estatutos internos del inmueble no prohíben tener animales, y de hecho hay otras mascotas que todavía siguen residiendo en él.
Esta perra es Noa, la víctima de un conflicto entre vecinos por lo que hace cerca de un mes tuvo que dejar la casa en la que llevaba nueve años viviendo. "Llego a casa, abro la puerta y es muy duro... ella es mi familia", comenta Irene, su propietaria.
El alto tribunal gallego, a partir de la denuncia presentada por un vecino y tomando como base las normas internas de la comunidad, dictó una sentencia prohibiendo tener animales que puedan causar molestias.
"Perdió en primera instancia, pero ganó en la Audiencia Provincial y tenemos que cumplir con una norma que no está en los estatutos... es sólo para zonas comunes", comenta Irene.
Para ella, la denuncia responde más bien a cuestiones personales, ya que son sólo dos vecinos los afectados. Otros todavía siguen conservando sus mascotas.
"Hay gente que viene en verano y trae a sus mascotas..."
Ahora Noa está con una familia de acogida, pero Irene no descarta continuar con la lucha con tal de tenerla de nuevo en casa.
Si quieres ayudar a Irene y a su perrita Noa, por favor FIRMA ESTA PETICIÓN.