Artículo de Mariel Retegui, tomado de lmneuquen.com.ar
Los vecinos señalaron que el sábado por la tarde los animales murieron tras
haber mordido huesos aparentemente rociados con veneno.
NEUQUÉN.
Los vecinos de Valentina Sur se mostraron preocupados porque ocho perros y un gato aparecieron muertos el sábado por envenenamiento. Le adjudican la autoría a otro vecino que reside en la misma cuadra y que se dedica a la fumigación. El hecho ocurrió en la calle Los Pinos, donde los perros están detrás del cerco o en su defecto atados, si es que tienen algún resquicio para escaparse. El sábado por la tarde, ocho perros se fueron muriendo casi en el acto, al parecer, luego de haber mordido huesos envenenados.
El domingo por la mañana personal de Cliba retiró a los animales de las veredas donde estaban tirados. "Ese día no estuve un par de horas porque me fui al río. Se ve que el labrador saltó sobre el montículo de basura, que todavía no vinieron a buscar los municipales, y se fue. Volvió envenenado supuestamente por un plaguicida denominado Paratión y murió enfrente de casa", relató Ana Soto, a quien se le murió un perro y un gato. "El labrador nunca salió fuera de casa", aclaró entre lamentos. "No puedo decir nada acerca de quién lo hizo, porque no estaba. No sé quién fue, solo por comentarios", agregó. Pero no solo el labrador al que llamaba "Jimy" se le murió, el domingo por la mañana uno de sus gatitos se fue de su lado, se trepó a un techo que tiene hacia el fondo del patio y a los pocos minutos bajó, convulsionó y se murió de inmediato.
Los vecinos aseguraron que no tenían problemas previos ni personales con el supuesto autor del hecho, pero sí sabían de sus quejas porque aseguraba que los demás animales ingresaban a su casa y le quitaban el alimento de su perra. "Este hombre decía que no fue quien los envenenó, pero lo vieron dos personas: una cuando le dio los huesos con veneno y otra vio cuando le metió una jeringa dentro del hocico a uno de los perros", dijo Jonatan, quien aseguró que no se llevaba mal con esta persona e incluso tiene una relación de parentesco con la familia de su mujer. "El sábado a las 5 de la tarde encontré muerto a mi perro Beethoven. Salvamos a uno que ahora lo tenemos atado. Vi un perro tambaleando en el patio de al lado. Cuando salí mi perro ya estaba muerto. Una vecina me dijo que este hombre le había dado un hueso al que roció con veneno a través de una jeringa", dijo una vecina cuyo nombre no quiso revelar. Comentó que un par de meses atrás había corrido a sus perros porque dijo que lo tenían cansado.
La mujer dijo que ese sábado se había presentado en dos oportunidades en la Comisaría 44 para radicar la denuncia, pero que no le habían dado importancia. Incluso trataron de llamar a algunos veterinarios, pero no se habían presentado alegando que las mascotas ya estaban muertas. Los vecinos aseguraron que el hombre ya había matado a machetes a dos galgos de una familia porque le entraban a comer la comida de sus perros.
Desde el Municipio recomiendan hacer la denuncia
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Desde la Dirección de Medio Ambiente del Municipio señalaron que no tienen injerencia a través del área de Zoonosis y Vectores, y les recomendaron a los vecinos radicar la denuncia policial para que ellos puedan realizar las pericias correspondientes.
"Tenemos injerencia con perros vivos. A lo sumo podemos levantar los cadáveres de los animales con CLIBA para deposición final como residuo, tal como lo hicimos inmediatamente, por posible envenenamiento para evitar que alguien los toque", indicó la directora de Medio Ambiente, Paola Guerrero.
Señaló que se trata de supuestos y que no están las pericias para determinar el veneno causante de la muerte de los animales. "No hacemos ese tipo de intervención, aconsejamos que actúe la Policía. En caso de ser paratión, como dicen los vecinos, está prohibido a la venta. Legalmente está prohibido pero eso no quita que lo haya podido conseguir o haya sido otro tipo de veneno que igual cause la muerte de los animales", agregó la directora municipal.