Te la preparas, te vas a sentar para comer y te das cuenta que te has olvidado la servilleta, te levantas…solo, DOS SEGUNDOS, te giras y zassssssssssssss…tu preciosa hamburguesa ha desaparecido.
What? Debajo de la mesa, tu perro la está engullendo como si no hubiera un mañana… ¿te suena?
Estoy segura que más de uno reconoce este momento de semi desesperación.
Asúmelo, tu perro tiene ANSIEDAD por la COMIDA.
Si tu animal nunca ha tenido ansiedad por la comida y de golpe la tiene, puede estar provocada por algunos de los factores siguientes:
Estrés: un animal que lo sufre puede tener ansiedad. Este estrés ha podido ser provocado por:
. Un accidente
. Un trauma
. Una mudanza
. La llegada al hogar de un nuevo miembro de la familia, ya sea humano o animal, puede comer más como una demanda de atención.
Medicación: algunos tipos de medicamentos, especialmente los que tienes corticoides pueden provocan ansiedad.
Enfermedades: algunas como el hipotiroidismo, la diabetes u otras, pueden llevar a tu peludo a comer con ansiedad.
¿Cómo le podemos ayudar?
Estableciendo un horario de comidas.Revisando las veces que come. Si solo come una vez al día es posible que llegue con mucha hambre a la hora de comida y eso puede hacer que lo que coma lo haga con ansiedad.Dos veces al día puede ser una buena pauta.
Tener juguetes tipo Kong que pueden calmar su ansiedad.
Realizar juegos de olfato, repartiendo granitos de pienso por la casa para que los encuentre. Este tipo de juegos es muy estimulante para el perro, ya que realiza la búsqueda, la encuentra y ¡encima se lo puede comer!.
Usar un comedero especial anti-atracones: no son planos, tienen una serie de salientes que obliga al animal a ir parando para comer.
Realizar ejercicio con nuestro perro. No se trata de hacer la maratón con él si no está acostumbrado, sino de pasar un tiempo de calidad con él. Crearemos mejores vínculos con nuestro animal y se sentirá más partícipe de nuestras vidas.
NO dar de comer al animal en la mesa. Es una costumbre muy nuestra, especialmente con los perros que se te quedan mirando como si no hubieran comido en su vida y tú sucumbes dándoles algo de lo que tú comes. Haciendo eso aún generamos más ansiedad.
Darle comida de buena calidad. El pienso de nuestro animal debe tener una proporción adecuada de proteínas de alta calidad. Piensa que los piensos más económicos sustituyen las proteínas por cereales. Esos cereales se hinchan en el estómago dando falsa sensación de saciedad, ya que al poco rato vuelven a estar hambrientos y por lo tanto, ansiosos por volver a comer.
Ir intercalando comida húmeda en su dieta es muy bueno para que no se aburra de comer siempre lo mismo. A veces aún aplicando todas las pautas anteriores, parece que no se acaba de solucionar, que “falta” algo. ¿Puede la Terapia Floral ayudar a mi perro a gestionar su ansiedad por la comida?
Sin duda, especialmente cuando las causas de dicha ansiedad tienen que ver con las emociones que ya hemos mencionado anteriormente:
Por un accidente.
Falta de un ser querido,ya sea animal o humano.
Le cuesta adaptarse a los cambios: una mudanza, unas obras en casa.
No se realizan las presentaciones de un nuevo miembro de la familia de manera correcta.
Porque de alguna manera se siente “abandonado”, aunque no lo esté en realidad.
Ha pasado hambre en algún momento de su vida y lo vive como un trauma.
Cuando se trata de un perro que ha estado en refugio o protectora y veía “amenazada” su comida.
O por cualquier otro motivo que le pudiera causar, miedo, estrés, inadaptación, etc. Nuestro preparado o sin ansiedad le va a ayudar al gestionar todas esas emociones, a asimilarlas y a aprender y asimilar mejor todas las pautas anteriores.
Mil gracias por estar aquí, apoyando mi trabajo y el de la Terapia Floral.
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Ronroneos.