¿Cuál es la verdad? Pues va a depender de ciertas características del perro. Veamos pues cómo saber si tu perro pasa frío o no en invierno.
¿Pasa frío mi perro? Veamos qué debes tener en cuenta para saber si tu perro pasa frío o no en invierno:
Su tamaño. Está comprobado que los perros pequeños son más frioleros que los perros grandes. Esto es así porque tienen más piel en relación a su tamaño por lo que el calor corporal se escapa con mayor facilidad.
El peso. Cuanto más grasa más difícil es que se escape el calor corporal, por tanto, los perros de constitución delgada son más propensos a pasar frío que los de constitución gruesa (por ejemplo, galgo versus frenchy).
La edad. Los cachorros y los perros mayores se encuentran con dificultades a la hora de atorregular su temperatura corporal, por lo que tienden a pasar más frío que un perro adulto.
Su sistema inmunológico. Un perro sano también tiene mejor capacidad de autorregular su temperatura corporal que un perro enfermo.
Su tipo de pelaje. El tipo de pelo de un perro indica si está preparado para combatir el frío o no. Un Husky, un Samoyedo, un Pomerania tienen un tipo de pelaje en tres capas que los aíslan completamente del frío. Por contra, ciertas razas de perros sin pelo o de pelo muy corto como puedan ser los galgos tienden a pasar frío porque apenas tienen protección.
El color de su pelaje. El color negro absorbe mucho más calor que el blanco. Las razas cuanto más oscuras más capacidad tienen de absorber el calor. A partir de aquí hay que tener en cuenta la temperatura en la calle.
¿Qué temperaturas son susceptibles de provocar frío en nuestros perros?
Vigila la temperatura exterior
Uno puede preguntarse a qué temperatura debemos plantearnos si el perro pasa frío o no.
Bien, atentos a estos rangos de temperatura:
Se estima que a los 8 grados algunos perros que cumplen con las características mencionadas anteriormente empiezan a sentir frío.
A los 0 grados, las razas más vulnerables lo pasan realmente mal.
A -6 grados de temperatura todos los perros pueden estar en riesgo de hipotermia y/o congelación.
Cómo ayudar al perro a no pasar frío
Para evitar que nuestro perro coja frío y provoquemos una bajada de su sistema inmunológico o provoquemos un resfriado en el perro ten en cuenta estos sencillos tips:Evita en la medida de lo posible los choques térmicos: la temperatura interna de casa no la tengas muy elevada para evitar cambios bruscos de temperatura.
Evita realizar el paseo principal (el que más tiempo dura en la calle) en las horas de más frío del día, es decir, a primera y última hora del día.
Acude a la ropa de abrigo siempre que haga falta y tu perro acepte con agrado el abrigo. A veces la ansiedad por llevar un abrigo es peor que el frío que pueda pasar.
El uso de calzado en los perros solo es imprescindible en aquellos casos en los que el perro tiene que dar su paseo sobre hielo o nieve, ya que sus almohadillas se podrían agrietar provocando dolor en sus extremidades. ¡Paciencia! Pronto llegará la primavera.