Nuestros perros se pasan la mayor parte del tiempo durmiendo y es que dormir es fundamental para su salud física, mental y emocional.
Por eso, elegir bien el tipo de cama que se adapta a sus necesidades en primordial.
Hoy hablaremos sobre los tipos de camas que hay y cómo saber cuál necesita tu perro.
Tipos de camas para perros
Si vamos a cualquier tienda para mascotas, ya sea física u online, nos sorprenderemos de la variedad de camas que hay: de todas las formas, colores y texturas.
Debemos evitar dejarnos llevar por las camas que nos entren por los ojos por su belleza y primar sobre todo el tipo según la necesidad que tenga nuestro perro.
Empecemos.
Camas guarida
Las camas guarida son aquellas camas que son cerradas y tienen forma de cueva.
Son muy recomendables para los cachorros, sobre todo, cuando son separados de sus madres por primera vez.
Su primera cama debe ser una cama guarida porque le dará seguridad y se sentirá protegido en su interior, además, es una cama muy calentita y con poca luz, lo que ayudará a mejorar su descanso.
No olvidemos que los cachorros pasan la mayor parte del tiempo durmiendo.
Ahora bien, si tu perro es asustadizo y temeroso, apuesta también por este tipo de camas porque lo que busca un perro temeroso es sentirse protegido y este tipo de camas consiguen ese efecto.
Algunos ejemplos:
Camas alfombra
Suelen ser las más económicas porque son muy sencillas y básicamente sirven para separar cualquier superficie del perro.
Por ejemplo, si queremos que el perro nos acompañe viendo la tele, podemos colocarla sobre el sofá para evitar que el perro manche el sofá.
O si queremos compartir cama con el perro pero queremos que no lo llene todo de pelo, podemos colocar esta cama alfombra sobre la cama.
¿Viajamos mucho en coche? Pues esta cama es perfecta para ponerla en el asiento trasero para que descanse.
Algunos ejemplos:
Camas cuna o camas nido
Las camas cunas son las camas más comunes.
Pueden ser cuadradas, redondas, pero las más comunes son las rectangulares.
Se les llama camas cuna o nido porque son ideales para perros que adoran acurrucarse o apoyar su cabeza sobre algo.
Perfectas para el invierno ya que abrazan al perro y lo mantienen calentito.
Hoy en día las fabrican de diferentes materiales, y últimamente triunfan las fabricadas con viscoelástica ya que se amoldan al cuerpo de tu perro y la hacen mucho más cómoda.
Colchones o colchonetas
Son ideales para aquellos perros que adoran dormir estirados, por lo que necesitan mucho espacio.
También si en casa hay más de un perro estos colchones son perfectos para aquellos que gustan de compartir cama.
Y para el verano, es la mejor opción ya que permite la libre circulación del aire.
Camas ortopédicas
Las camas ortopédicas están recomendadas para perros más ancianos que tienen problemas de artritis en sus piernas.
Estas camas están fabricadas con viscoelástica y capas de gel para amortiguar las patas de los perros.
El objetivo de estas camas es mejorar la calidad del descanso del perro con dolores articulares.
Suelen ser más caras que el resto de camas porque contienen materiales que quieren asegurar la reducción del dolor, por lo que el perro lo agradece mucho.
Camas para el verano
Son tumbonas que se convierten en la mejor opción de descanso en verano.
Ligeras, frescas y levantadas del suelo para evitar el calor de la superficie.
Como ves, hay mucha variedad de camas y todas tienen un objetivo: garantizar el mejor descanso de tu perro.
Saber elegir bien el tipo de cama que necesita tu perro mejorará notablemente su sueño y su descanso.
Sandra Ferrer. Creadora del Programa de Educación Canino “Cómo Educar a un Cachorro”