Un perro encadenado sólo puede observar cómo la vida le pasa por delante
El castigo más cruel para un perro (sociables por naturaleza) es el confinamiento a la soledad. Los perros son animales de “jauría” por lo que es muy importante para ellos estar acompañados. La gente que amarra o condena a la soledad a un perro en un patio o un techo simplemente cree que son una especie de máquinas y no toma en cuenta lo que para ellos significa que les rasquen detrás de las orejas, jueguen y expresen contacto con ellos.
No se engañe a si mismo diciendo que los perros se “acostumbran” a estar afuera. A menos que Usted u otro perro se encuentren en el patio, éste pronto perderá su encanto y se parecerá cada vez más a una prisión. Los ladridos constantes son un llamado de atención. Si dejan de ladrar no es porque esté contento sino porque se ha rendido y perdió toda esperanza de rescate.
Sugerencias para proteger a su mascota sin aprisionarla:
- Construya una cerca que impida que su mascota se escape y a la vez los proteja de quien quiera hacerles daño. Si por el momento esta opción no está disponible a su presupuesto, asegúrese de que la cadena o soga sea lo suficientemente larga como para que su perro pueda hacer ejercicio sin enredarse. Utilice un arnés en vez de un collar para evitar que se ahorque. Estar acompañado de otro perro puede ayudar a disipar la soledad, pero es importante que estén esterilizados o castrados para evitar la reproducción constante o las peleas por territorialidad. Considere, sin embargo que esto no sustituye el contacto afectivo con el dueño, pues podríamos tener dos prisioneros en vez de uno. Bríndele oportunidades para ejercitarse. Los perros necesitan correr, explorar olfatear, etc. Haga caminatas diarias (es bueno para usted también). Es recomendable el uso de un arnés en vez de collar. Alegre sus días con juguetes. Cualquier cosa sencilla como un trapo amarrado con una pelota será motivo de distracción- Recuerde que su perro necesita masticar, por lo que le serán útiles huesos de goma y otros artículos masticables. Lleve a su perro a la Escuela. Si tiene algún problema de conducta en vez de confinarlo al patio que sólo logrará empeorar la situación, lo más apropiado es una clase de entrenamiento canino que mejorará la comunicación con su perro. Asegúrese de que está protegido de las condiciones del clima: sol, lluvia, calor, frío. Acondicione su estadía y su espacio para dormir, debidamente acolchado. El contacto directo con el piso puede ocasionarle lesiones y escoriaciones. Suminístrele suficiente comida y abundante agua fresca. En nuestro ambiente el acceso a agua limpia es muy importante para mantener la salud de su perro. Llévelo al veterinario para sus chequeos regulares y vacunaciones. Es importante acostumbrarlo al traslado a la consulta. Esterilice a su perra o castre a su perro. Un perro sin castrar es como un amante frustrado impulsado por sus instintos, y es más fácil que sea agresivo con Usted o con sus niños.
Consulte precios en los centros veterinarios de su localidad.
Si prefiere visite el Hospital de Mascotas, donde recibirá la orientación necesaria sobre el tema.
Material consultado: Folleto de PETA (Personas por la Ética en el Trato a los Animales)
