El Springer Spaniel es un perro atlético y elegante, con orejas caídas y dulces ojitos que hacen la delicia de cualquiera.
Pero también es un perro que puede tener algunos problemas. Los más comunes son:
Escapismo
Tirones de correa
Ladrido compulsivo
Mordisqueo
Pedir durante la comida
Como antiguo perro de presa, el Springer Spaniel, en general, conserva dos características fundamentales: una enorme cantidad de energía, y la búsqueda de presas.
Esto significa que siempre tiene ganas de correr, tirar, saltar, buscar… siempre quiere jugar un poco más. Puede llegar a ser agotador. Pero es que, entonces, cuando dejas de jugar porque tienes trabajo, tareas, o simplemente quieres descansar, el perrito puede darse a algo todavía peor… y es a morderlo todo.
El mordisqueo viene dado por su pasado como perro de presa, o el perro que recoge las presas del suelo. Es algo completamente natural, pero que sin duda hay que controlar para una buena convivencia en casa.
Para todo esto, dos consejos:
Hazte con juguetes interactivos. Alfombras de olores, bolas rellenas, cuencos laberinto… Hay una enorme variedad de juguetes con los que un perro puede jugar solo.
¡Debes enseñarle a jugar! Los perros muchas veces ignoran los juguetes porque no se divierten con ellos, porque no saben utilizarlos. Es importante que dediques un rato de vez en cuando a motivarlo: mueve los juguetes, llénalos con golosinas, lánzaselos… que vea que son divertidos.
Como un último tip, muy poderoso: deja al alcance de tu perro tres o cuatro juguetes durante un mes, y guarda el resto. Al final de ese mes, cámbialos por otros tres o cuatro. otro mes, y otros tres o cuatro. De esta manera tu Springer Spaniel siempre tendrá “juguetes nuevos” y no se aburrirá.
Marcos Mendoza
PD: ¡No lo olvides! Si quieres saber más, no dejes de leer este libro de Simona Salanueva, especial para educar a un Springer Spaniel.