La investigación ha mostrado que tan sólo con tener un perro, disminuye la hormona del estrés denominada cortisol. Mientras que la interacción social entre las personas y sus perros en realidad eleva los niveles de la hormona del bienestar denominada oxitocina, la misma hormona que une a las madres con sus hijos. De hecho, un 84% de los pacientes con trastorno de estrés postraumático a los que se les ha proporcionado un perro adiestrado informaron de una reducción significativa en sus síntomas y un 40% fueron capaces de reducir sus medicamentos, según una encuesta reciente.
2. Baja la presión sanguínea
Los beneficios de la reducción del cortisol y el aumento de la oxitocina por tener una mascota también ayudan a mantener la presión sanguínea en niveles adecuados. "Tener y cuidar de una mascota permite apreciar la belleza de la naturaleza. Es relajante y trascendental", explica Barron.
3.- Fomenta la salud cardiaca
Según señala Barron, la Asociación Americana del Corazón hizo pública una investigación en la que se aseguraba que tener un perro como mascota es una forma de mantener controlada la enfermedad cardiovascular.
4. Alivia la soledad y la depresión
Un estudio de 2011 descubrió que quienes poseían una mascota tenían una mejor autoestima. Otro estudio determinó que las mascotas proporcionaban un mejor apoyo social que los humanos para mitigar la depresión. "Cuidar de una mascota proporciona una finalidad al propietario", señala Barron. Además, las mascotas son buenos catalizadores sociales para reunir a personas que comparten los mismos intereses por los animales.