Los Chihuahuas son cada vez más populares en nuestras calles, ya que, al ser tan pequeños, se adaptan perfectamente a cualquier espacio, sobre todo si no disponemos de muchos metros cuadrados. Su tamaño le convierte en un canino muy solicitado por familias o por una persona sola, porque aportará felicidad, compañía, fidelidad y mucho amor. Además, tiene unas características que hacen de él la mascota perfecta: habilidad, rapidez e inteligencia.
El Chihuahua procede del estado más grande de la República Mexicana. Estos perros son ideales como animales de compañía, pero debido a su estatura, necesitan unos cuidados especiales de los que tenemos que estar informados para que disfrutemos de su presencia durante muchos años. Puedes encontrar dos tipos, de pelo corto y de pelo largo; variantes diferenciadas para acudir a los concursos de raza por separado.
Origen mexicano
Existe cierta diversidad con respecto a su procedencia, pero la mayoría de tesis apuntan hacia su origen mexicano. Aunque esta teoría es la que cobra más fuerza, otros investigadores apuestan por el continente europeo como punto de emanación de este precioso perrito. De todas formas, se manejan muchas más pruebas que corroboran la primera de las hipótesis.
Es un animal muy antiguo, ya que desde hace muchos años, se ha venido relacionando al Chihuahua con los Toltecas (siglo X), que lo utilizaban como símbolo religioso en sus ceremonias. Los que también tenían a este can en sus actos de adoración, fueron los Aztecas, que utilizaban sólo la variedad con poco pelo.
En cuanto a su descendencia también encontramos dos suposiciones, ya que unos creen que procede de los 'Techichi'; perro pigmeo de Tula que tiene un gran parecido físico al Chihuahua, y otros tienen la certeza de que la descendencia procede del cruce entre perros aztecas y el 'Telpetzcuintli'; perro del estado de Chihuahua en México.
La primera fecha que relaciona México con este animal, nos remonta hasta 1784. A partir de este año, encontramos en este país infinidad de variedades de la especie, ya que los podemos ver en diferentes tamaños y colores.
Fidelidad al cien por cien
Nuestro pequeño amigo tiene unas características asombrosas que le convierten en un compañero ideal. Al ser muy cariñoso, noble, atento y vivaz, se le considera un buen perro de vigilancia, ya que reacciona ante cualquier ruido extraño. Crea lazos muy estrechos con una o dos personas de su entorno, precisamente, con las que él ve que tiene una mejor relación.
Considera a su dueño como su mayor protector por lo que le defiende hasta el último momento. Esta raza no es consciente de su tamaño y, por esta razón, puede mostrarse furiosa ante perros mucho más grandes. La casa la considera como su territorio y la defiende siempre que un extraño intenta entrar en ella.
Cómo hacerle feliz
El Chihuahua necesita una gran cantidad de contacto humano en forma de caricias. No te extrañes cuando intente poner su cabecita debajo de tu mano, porque eso es síntoma de que necesita sentirse mimado. Tiene unos ojos muy expresivos, y a través de ellos, con el tiempo, llegarás a saber qué es lo que quiere simplemente con mirarle.Es preciso tener cuidado con sus extremidades porque son muy frágiles. Muchas personas piensan que, por su tamaño, es ideal para los pequeños de la casa, pero esto no es del todo cierto, ya que los niños no son conscientes de la fuerza que tienen y le pueden hacer daño sin que se den cuenta.
Además, le encanta verse premiado. Como a todo el mundo, una recompensa hace que su seguridad aumente. En este caso, las golosinas, si son pequeñas, mucho mejor, porque la obesidad le puede producir problemas. Si le das comida húmeda, puede provocarle diarrea, por eso te recomendamos que le des comida seca como pienso o croquetas. Aunque se aconseja ir racionando su comida, ellos prefieren comer en dosis pequeñas durante el día a hacerlo sólo una vez.
Cuídale, te acompañará mucho tiempo
La fama del odio al baño la tienen los gatos, pero lo que mucha gente no sabe es que los canes también la sufren. De todas formas, a nuestro querido amigo se aconseja bañarlo una vez al mes con un champú especial, evitando que el agua entre en las orejas, porque le podría provocar infección. Después del baño, córtale las uñas porque al no tener un desgaste natural, las tiene muy largas y duras, aunque siempre es preferible que lo haga un veterinario.Si vives en una casa con jardín, controla a menudo la verja, porque al ser tan pequeño se cuela por cualquier hueco. A la hora de sacarlo a pasear, no le hagas caminar mucho, sobre todo en invierno, ya que no soporta temperaturas inferiores a 4º C. En estas ocasiones, abrígalo bien y paséale durante menos tiempo de lo normal, te lo agradecerá.
No le des chocolate, porque aunque para nosotros su digestión se hace de forma rápida, los perros en general tardan el triple en desecharlo y les puede llegar a producir ceguera e incluso la muerte. La leche de vaca tampoco es muy recomendable por su alto contenido en grasas. Admiten la leche proveniente de seres carnívoros (como la procedente de las mamas de su madre) y no de herbívoros. En cambio, el yogurt natural y el queso suave les encanta, al tiempo que resultan muy beneficiosos para su organismo.
Evita darle alimentos como cebolla, nueces, hígado y, sobre todo, las sobras de la mesa, porque le pueden provocar una mala digestión. Procura no hacerle caso a todo lo que te pide, porque, que a él le guste, no significa que sea bueno para su organismo.
Dueño y señor
El carácter de nuestra mascota no sólo depende de la herencia, sino que nuestro adiestramiento forma parte del 50% del mismo. El Chihuahua tiende a querer controlarlo todo, pero tiene que aprender que su territorio también es de mucha otra gente a la que debe respetar. De lo contrario, se pondrá furioso cuando le intentes ordenar algo o, incluso, cuando te sientes en el mismo sitio que él. Este comportamiento también lo deja entrever en la calle, donde se pone en contra de cualquier perro, grande o pequeño, si ve que se acerca a su dueño. A los que más respeta son a los de su propia raza.
Una vez que hayas conseguido que se adapte a tu hogar y esté tranquilo y cómodo con los miembros de la familia, comenzará a ladrar a todo el que venga de fuera. De esta forma, tus amigos y las personas ajenas a tu vivienda, no se creerán lo bueno, simpático, cariñoso e inteligente que es cuando se lo transmitas.
Un síntoma de que se siente inseguro o con miedo, es el temblor. Esta reacción es muy común en estos perros ya que son muy nerviosos. Muchas veces, sus temblores no son debidos al frío, sino a la infelicidad.
Es una raza muy especial, que convierte a estos perritos en seres increíbles. Son pequeños, inteligentes, bonachones, fieles y muy cariñosos. Si tienes la oportunidad de tener uno, no la dejes escapar, ya verás como no te vas a arrepentir: acabará formando parte de tu vida en un tiempo récord.