Cuidar la alimentación y practicar deporte es esencial para tu mascota. Al igual que nosotros, la salud de nuestro pequeño será mejor si controlamos su peso, damos grandes paseos, practica algo deporte…Así, evitaremos problemas como la obesidad, el sedentarismo, etc.
Cada perro tiene unas necesidades físicas diferentes, y por lo tanto, hay que buscar los ejercicios que mejor se adaptan en función de su energía, tamaño, raza, etc. Hay perros como el PitBull que pueden practicar mucho más ejercicio que otros que tendrán suficiente con pequeñas vueltas en el parque.
Lanzamientos
Para los perros más energéticos, el típico juego de lanzar objetos no falla. Una pelota o un frisbee son perfectos para agotar su energía en el parque. Lánzaselo una y otra vez y verás cómo se divierte.
Natación
Cada más es más frecuente apuntar a nuestro perro a natación. Es un deporte muy sano que les encantará y donde mueven todos sus musculitos. Llévadle dos veces por semana y su cuerpo os lo agradecerá.
A correr
Este deporte es el perfecto para que los dos estéis en forma. Ponte tus zapatillas de correr y practica con tu pequeño.
Empieza a acostumbrarle poco a poco, igual que hiciste tú en su día. No queremos que se sobrepase y acabe con la lengua fuera. Ten en cuenta que él nos intentará seguir hasta el final y agotará todas sus fuerzas por tal de ir con su dueño. Ve aumentando el ritmo y el tiempo con el paso de los días.
Bicicleta
Al igual que con el footing, podéis practicar ciclismo junto a vuestro perro. Del mismo modo, debéis acostumbrarle poco a poco en cuanto a ritmo y tiempo; y también a correr junto a la bici para evitar que no se cruce o se den posibles accidentes.
Búscale un compañero
A veces llevarle al parque y juntarle con otro perrito es suficiente para que practique deporte. Búscale un amigo de juego con el que se lleve bien y con el que le goce jugando. Seguro que pasan un buen rato y se hacen amigos.
Recuerda que dependiendo de tu perro necesitará más o menos ejercicio físico, pero todos lo necesitan. No dudéis en aprovechar vuestras horas de ejercicio para que él también se ponga en forma.
