El Terrier de Japón es una raza bastante rara y difícil de encontrar. Se parece al Toy Terrier por sus orígenes de mezcla con otras razas, y hoy en día hay muy pocos ejemplares.
Fue un perro creado para la compañía exclusivamente, y por eso, tienen un carácter vivaz y alegre, con un temperamento ideal como mascota.
Su historia
El Terrier japonés, de acuerdo a los investigadores, se estima que fue creado durante el siglo XVII exclusivamente como mascota. Se convirtió en un perro de compañía en los puertos de Nagasaki, Kobe y Yokohama.
Se piensa que esta raza tiene una mezcla entre el Toy Terrier, el Bull Terrier y el galgo italiano. Otros dicen que sus ancestros son los Fox Terrier de pelo liso que fueron llevados a Japón desde los Países Bajos en la década de los ’20.
El Terrier japonés sufrió un significativo descenso de su población durante la Segunda Guerra Mundial y, desde entonces ha ido extinguiéndose de sobre la faz de la Tierra, la cantidad de ejemplares existentes en la actualidad es mínima, hecho de suma preocupación. Hoy en día, el número de nacimientos de esta raza es muy bajo y se teme su extinción.
Características físicas
Esta mezcla de razas, ha hecho que el Terrier japonés fuera reconocido como raza en 1930 como un perro: pequeño (de unos 3 kilogramos de peso), de cruz alta, vientre recogido y un pecho profundo. Un cuerpo compacto y elegante en tamaño reducido.
Entre las características fenotípicas que posee el Terrier japonés destacan: el rostro o cara chata, la nariz de estos pequeños es de negro azabache, sus ojos suelen ser marrones ovalados, tienen orejas altas, de reducido tamaño y con una particular forma de V. Por su parte, la cola del Terrier japonés es muy delgada, usualmente, sus amos se la amputan.
Su pelaje es muy suave, denso y corto, y en general, es de color blanco con la cabeza negra, aunque puede ser negro y marrón también. A veces tiene manchas en el cuerpo, por lo que puede llegar a ser tricolor.
Personalidad y carácter
Es una raza muy inteligente y alegre. Es vivaz, cariñoso, ágil, y muy expresivo. Se dice que puede leer el estado de ánimo de sus amos.
Al ser un perro de compañía, le encanta jugar y estar con gente. Es muy amable con las personas y con otros perros, y no es nada agresivo. Además, sienmte una gran fidelidad hacia sus amos.
Al tener un carácter tranquilo, es fácil de adiestrar. Se aconseja iniciar el adiestramiento desde cachorro y no utilizar refuerzos negativos ya que son muy sensibles.
En general, es un perro alegre, vivaz, divertido, juguetón, ¡perfecto como mascota!
Imagen: http://listadecanes.blogspot.co.uk