En un ataque al templo de la diosa, el monje resulta herido y muere bajo sus pies, pero en ese momento Sinh, su incondicional gato, que siempre le acompañaba, se posa sobre su cuerpo para permitir la trasmigración del alma de Mun Ha.
Un misterioso origen
Al margen de esta bonita historia, son muchas las teorías que se barajan sobre el origen del gato birmano. Una de las más comunes es aquella que señala a Francia como cuna de su procedencia por medio de varios cruces.
Por otro lado, la difundida leyenda explica la llegada a Europa del felino gracias al general inglés Gordon Russell. Sus tropas observaron a los gatos cerca del templo dedicado a Tsun Kyan Kse y el militar fue obsequiado con una pareja. Sólo la hembra, de nombre Sita, sobrevivió al viaje, pero la suerte quiso que estuviera preñada.
Russell los aceptó como regalo de los monjes por haberlos defendido de un saqueo al templo; pero crea cierta duda si tenemos en cuenta que al ser considerados gatos sagrados no podían salir del territorio birmano. Es así como la raza conseguiría instalarse en el continente europeo. El país galo la reconocería oficialmente en el año 1920.
Características físicas
La característica más popular son los guantes que, sin superar el nacimiento de sus dedos, posee en sus patas delanteras y traseras. De cuerpo vigoroso, compacto y un tanto alargado, llegando a la talla media. Su cabeza es curvada y ancha, con pómulos muy definidos y una nariz mediana, igualada con el conjunto de su cara. El azul zafiro de sus ojos, con algunas variedades de tono, y sus orejas pequeñas, separadas y delicadamente redondeadas le dan un aspecto muy particular a su mirada.
El color de su pelaje, dorado en la parte superior y costados de su cuerpo, y sus tonos más oscuros en el hocico, patas, orejas y cola le incluyen en el grupo de razas que llevan los genes siameses. Semilargo y sedoso, abunda en su cuello formando un apreciable collar, y en su cola. A pesar de ello tiene muy poco subpelo. Entre las variantes de color más significativas y reconocidas están los punto foca, lila, azul y chocolate.
De carácter complejo, pero muy sensible
En este gato encontraremos un amigo entrañable, pues fundamenta su relación en la confianza y el amor. Incluso aquellos que cuentan con su compañía aseguran que puede percibir sus estados de ánimo. Es un poco tímido, pero algo testarudo, llegando al desafío por conseguir lo que le interesa. Hace honor a su nombre con su carácter tranquilo, sociable y delicado, además de imprevisible.Es muy inteligente, incluso se asegura que adiestrándole se le puede enseñar a traer pequeños objetos, algo que no resulta para nada interesante en otros gatos; entre otras cosas porque al no estar acostumbrados a dar ni recibir órdenes, a excepción de su relación madre e hijo, es muy difícil motivarlos para que aprendan algo, más aún si no llama especialmente su atención.
Quizás sea su necesidad de constante actividad y su amor por el juego y los grandes espacios, ya que se divierte mucho corriendo de un lado a otro, lo que le hace poco idóneo para vivir en sitios significativamente pequeños. Pero, a pesar de su incesante deseo de movimiento, disfruta de las jornadas hogareñas, llegando a pasar muchas horas en familia.
Sabe adaptarse y convivir con todos los miembros de la casa, con otros gatos o animales domésticos. Es el compañero perfecto indicado para familias con niños o que pasen mucho tiempo en casa.
Imágenes: Flickr.com (Gianluca Neri; Macdomeng; Fabiogis50; Gauis Caecilius; Joncallas)
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