El gato Burmés o Birmano procede de Birmania. Existen dos tipos de gatos Birmanos: el inglés y el americano.
De tamaño mediano, los machos Burmés pueden pesar hasta los 7 kg, las hembras algo menos.
Es un gato fuerte y sus músculos están bien desarrollados. Su cuello es corto y su cabeza tiene forma redondeada. Tiene los pómulos salientes y los ojos de color dorado. Sus orejas son medianas y están bien separadas. Sus patas son fuertes y su cola es moderadamente larga, recta, y redondeada en la punta. Su pelo, que es corto y suave, puede variar de color siendo más claro en la zona del vientre.
Es un felino tan cariñoso y familiar que su carácter se compara al de los perros, y tan encantador que es el gato perfecto para la familia.
Se adapta bien a la vida en pisos y su esperanza de vida ronda los 18 años.
Origen de la raza de gato Burmés
Existen leyendas que vinculan al gato Burmés con los monasterios birmanos, aunque en el siglo XV la raza ya estaba extendida por Tailandia.
Algunos siglos después, una gata Burmesa llegó a los Estados Unidos junto a un psiquiatra birmano que se encargó de la depuración de la raza mediante su reproducción para, después, exportarla por todo el mundo. La raza se oficializo en Norteamérica y en Europa en la década de 1950.
Personalidad del gato Burmés
El gato Burmés tiene una personalidad muy dulce, cariñosa y familiar. Es tranquilo y le encanta pasar el tiempo con las personas. Lo único que detesta es estar solo.
Es un gato inteligente, cariñoso, sociable y juguetón que demandará todo los días sus momentos de juego. Es un gran compañero para los niños. No es un gato territorial, así que no tendrás problemas si tienes otras mascotas.
El Burmés es un gato muy comunicativo. Utilizará su tono de voz dulce y suave para llamar la atención de su amo.
Salud
No se conocen enfermedades específicas en el gato Burmés que, con buenos cuidados, puede vivir mucho tiempo ya que es una raza muy sana y longeva.
De todas maneras, acude al veterinario para sus chequeos de rutina y, también, para sus vacunaciones y desparasitaciones.
Juega con tu Burmés porque, como todos los gatos, necesita hacer ejercicio.
Nutrición
Al gato Burmés le gusta comer varias veces al día, por lo que siempre deberás tener a su disposición alimento y agua fresca.
Su dieta tendrá que ser equilibrada y estar formada por alimentos de calidad que contengan abundantes proteínas. Acude a tu veterinario para que te informe al respecto.
Aseo
Aunque tiene el pelo corto, conviene cepillarlo de vez en cuando para eliminar el pelo muerto y evitar que se lo trague con el riesgo que eso conlleva.
También, tienes que limpiar sus dientes, ojos y orejas.
Video: información y curiosidades del gato de raza Burmés