El mayor problema es que muchos de estos acuerdos de compra-venta se cierran verbalmente, y esto dificulta enormemente la posterior gestión de las reclamaciones.
En el momento de la compra los papeles que el vendedor te debe entregar son:
- Factura de compra: debe estar lo más detallada posible con la fecha, la raza del perro, la edad, el CIF del establecimiento, el IVA (desglosado o incluido) y el precio pagado.
- Cartilla Sanitaria: es obligatorio que se incluyan los datos del colegiado que realizó los controles (vacunaciones, desparasitaciones, examen físico del cachorro, etc).
- Certificado 'libre de displasia': este documento acredita que los padres no padecen displasia de cadera. Este dato es particularmente importante en aquellas razas que están predispuestas a contraer esta patología: Labrador, Rottweiler, San Bernardo, Pastor Alemán, Pastor de Brie, Dogo Alemán, entre otras razas de tamaño grande o mediano.
- Pedigree o justificante de inscripción en el Libro de Orígenes Español: tendrán que llevar el sello, la firma del secretario y los datos del perro (raza, fecha de nacimiento, variedad, tatuaje y color). Si se entrega el justificante de inscripción, lo recomendable es que exista un contrato tipo donde se especifique claramente que el vendedor se hace cargo de las tasas y tramitaciones requeridas para la obtención del pedigree.
- Documento de garantía: el periodo de la misma deberá ser, como mínimo y por disposición legal, de 6 meses.
- Manuales de cuidados: en algunas tiendas regalan de forma opcional libros monográficos dedicados a la raza.
Si el responsable de la tienda de animales a la que has acudido se niega a suministrarte parte de esta documentación, desconfía de la compra y consulta en otros establecimientos con referencias.
Fuentes de información: Oficinas de Información de las Comunidades Autónomas; Federación de Usuarios y Consumidores Independientes; Confederación de Consumidores y Usuarios