Si decidimos tener un estanque hay varias cosas que vamos a meter, si o si, plantas acuáticas, para que mantengan el agua limpia y den un toque de color y peces o tortugas o ambos.
Los peces más populares para estanques son los peces goldfish o cometas y los koi, estos segundos prohibidos en muchos lugares.
Goldfish Koi
Pero como digo, pronto escucharás otros sonidos, son los sonidos de los insectos que atraidos por el agua y las plantas llegarán a tu estanque a revolotear, libélulas, grillos, saltamontes, mosquitos, moscas, y en verano chicharras, si te gusta la naturaleza el sonido de los grillos y las chicharras te va a encantar, y sumado al encanto y poder relajante de los estanques hará que pases horas y horas sentado observando ese pequeño ecosistema que has creado.
Si miras hacia el suelo verás también que hay hormigas, caracoles, y chinches de la malva o zapateros y cochinillas de la humedad, y si vas un poco más profundo notarás montones de tierra de un color diferente, si escarbas un poco hallarás lombrices de tierra.
Todas estas formas de vida no han pasado desapercibidas para sus depredadores, tanto insecto también atraerá la presencia de aves que vendrán a beber agua y alimentarse de ellos, ver bañarse a los pájaros en el estanque o formar nidos en los árboles de tu huerto o jardín es una sensación maravillosa al mismo tiempo que los escuchas cantar.
Gorriones, mirlos, verderones, verdecillos y en invierno pajaritas de las nieves vendrán a disfrutar de tu pequeño trocito de cielo.
Pero a nivel del agua también viene vida, no solo están en el estanque los peces y las tortugas que metiste inicialmente, has descubierto que otros animales.
Animales como caracoles de agua dulce, ¿pero como han llegado allí?
Seguramente cuando compraste las plantas para tu estanque en esas plantas habría huevos de caracol de alguna que otra especie, y en este espacio han crecido y desarrollado:
Las ranas también han llegado al estanque buscando el agua y a los insectos, ahora en tu estanque hay renacuajos y un buen puñado de la rana común croando y dando al estanque el aspecto que siempre has querido que tenga, un estanque sin ranas es como un amigo en graná, que ni tiene amigo ni tiene ná.
Pero no son los únicos anfibios que han aparecido, el sapo común y la salamanquesa también están por aquí en busca de presas, esta última siendo una visitante nocturna.
Y en el grupo de los reptiles lagartijas harán también el mismo trabajo que las salamanquesas pero durante el día.
Como veis, la vida en un estanque puede ser maravillosa, se crea un ecosistema que alberga multitud de especies y es muy bonito sentarse a estudiarlas, enumerarlas o simplemente, disfrutar observándolas.
Aquí te dejo un vídeo con una rana común y un galápago leproso compartiendo un caudal de agua al sonido del cante de un jilguero.
También puedes observar la vida en un estanque bajo el agua:
Si te ha gustado no dudes en compartirlo y suscribirte a mi canal de Youtube.