Infecciones respiratorias de tortugas

Infecciones respiratorias de tortugas

Las infecciones respiratorias son demasiado comunes en las tortugas mascotas, pero como pronto descubrirá, son tratables y prevenibles.

Primero, definamos qué es una infección respiratoria.

Cuando las tortugas inhalan los gérmenes, se encuentran con las membranas mucosas. Se trata de una capa de tejido especial que recubre el tracto respiratorio y ayuda con la deglución, la inmunidad y el intercambio de gases respiratorios.

Las membranas mucosas son una buena barrera contra las enfermedades, pero cada respiración trae nuevos microbios, lo que los convierte en un campo de batalla constante para el sistema inmunológico.

Cuando los gérmenes logran traspasarlos y atacar el tejido que se encuentra debajo, esto se conoce como una infección respiratoria.

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En las tortugas, las infecciones respiratorias (denominadas “IR”) pueden afectar cualquier parte del tracto respiratorio.

Cuando los senos paranasales o la cavidad bucofaríngea (boca y garganta) se ven afectados, se trata de una enfermedad del tracto respiratorio superior (URTD), mientras que una infección de los pulmones es una enfermedad del tracto respiratorio inferior, aunque la mayoría de las personas simplemente se refieren a ella como neumonía.

En este artículo veremos cómo diagnosticar, tratar y prevenir ambos tipos de IR.

¿Cómo contraen las tortugas las infecciones respiratorias?

Las IR a menudo ocurren por diferentes razones en animales cautivos y salvajes. En las tortugas salvajes, las IR bacterianas, fúngicas o parasitarias atacan a los animales débiles y juegan un papel en el control de la población.

A veces, también pueden ser el resultado de epidemias virales que pueden transmitirse de ranas u otras especies de tortugas. Los virus que causan estas epidemias son mortales y pueden infectar a animales razonablemente sanos.

Un ejemplo de esto es cuando los ranavirus (también conocidos como virus de la rana) atacan especies como la tortuga de caja del este (Terrapene c. Carolina) y la tortuga de caja de Florida (Terrapene c. Bauri), provocándoles pudrición bucal fatal y URTD.

En las tortugas en cautiverio, la mayoría de las IR provienen de bacterias gramnegativas, como las especies Pseudomonas o Mycoplasma, y casi siempre tienen un problema de cría como causa principal.

Las IR bacterianas ocurren cuando el sistema inmunológico está sobrecargado o no puede funcionar normalmente.

Las temperaturas incorrectas, la deficiencia de vitamina A y la falta de higiene son probablemente las tres causas más comunes de IR en las tortugas mascotas.

Muy ocasionalmente, se producen brotes de IR virales en animales cautivos, pero esto es menos común y se puede prevenir mediante estrictas medidas de cuarentena.

En algunos casos raros, las tortugas cautivas también pueden contraer RI fúngicas después de un largo período de tratamiento con antibióticos.

Tanto en los quelonios salvajes como en cautiverio, el ahogamiento puede causar neumonía. Cuando una tortuga se ahoga, sus pulmones se llenan de agua mucho más sucia que el aire que respiran habitualmente, lo que resulta en una sobrecarga bacteriana o fúngica. ¡El ahogamiento puede causar IR en animales que antes estaban 100% sanos!

¿Cómo sé si mi mascota tiene una infección respiratoria?

Como mencioné anteriormente, las IR se pueden dividir en dos categorías: enfermedades del tracto respiratorio superior (URTD) y neumonía.

Muchos URTD progresarán a neumonía si no se tratan, pero son más fáciles de detectar debido a más síntomas visuales.

Los síntomas de URTD incluyen:

Pérdida de apetito

Moco que sale de la boca, la nariz o los ojos, a veces formando burbujas

Epífora (lagrimeo excesivo de los ojos)

Letargo (pereza)

Sibilancias

Respirar con la boca abierta y estirar el cuello sin motivo aparente

Comportamiento cojo al tomar el sol
La neumonía puede ser más difícil de detectar y solo pueden presentarse uno o dos de los siguientes síntomas:

Pérdida de apetito

Letargo

Natación del lado inclinado o incapacidad para bucear (debido al líquido en los pulmones, lo que causa problemas de flotabilidad)

Sibilancias
Respirar con la boca abierta y estirar el cuello sin motivo aparente
Tortugas terrestres y tortugas caminando en círculos (menos común).

Áreas rosadas de piel en la parte inferior de las piernas y cerca del puente (parte del caparazón que conecta la parte superior con la inferior).

Como regla general, la neumonía es más peligrosa y puede matar a un animal en unos días. Sin embargo, de vez en cuando, también puede tomar una forma crónica y persistir durante meses. Afortunadamente, ambos tipos se identifican fácilmente con la ayuda de una radiografía.

Cuando ver a un veterinario

¡Al tener un reptil, cualquier cambio repentino en el comportamiento debería hacerte sospechar! ¿Tu mascota ha comenzado a enfurruñarse en la esquina? ¿O dejaste de sumergirte en el agua cuando te acercas?

Señales como estas pueden ser la primera advertencia de un problema. Si nota algo como esto, o cualquiera de los síntomas enumerados anteriormente, busque la ayuda de un veterinario de inmediato.

La neumonía a veces es muy discreta y muestra pocos síntomas. En casos como estos, a menudo encuentro que la pérdida de apetito es el primer síntoma notable. Esto es especialmente sospechoso durante el verano o en un recinto con un fotoperiodo estable.

No olvides que conoces mejor a tu mascota; si crees que algo está pasando, ¡probablemente sea así!

Cómo tratar las infecciones respiratorias

Ahora que hemos discutido cómo detectar las IR, veamos cómo tratarlas tanto en el veterinario como en casa.

Tratamiento veterinario:

Como menciono en el artículo Turtle Sneezing, la forma en que su veterinario diagnostica y trata una IR dependerá de su experiencia personal.
En términos muy generales, los veterinarios siguen un plan similar para diagnosticar y tratar las IR:

Examen visual rápido y auscultación (escucha con estetoscopio).
Radiografía para verificar si hay inflamación o líquido.

Análisis de sangre o hisopos para la identificación de microbios. También se puede realizar un lavado de pulmón para eliminar los líquidos para la prueba.

Administración de antibióticos, antifúngicos o antivirales.

Para los URTD, se puede enviar una tortuga a casa con instrucciones. Para la neumonía, se puede mantener una tortuga en la práctica para terapia de nebulización o apoyo nutricional. Esto puede mejorar las probabilidades de supervivencia.

No se alarme si su veterinario omite ciertos pasos; repetirá métodos que han funcionado con casos anteriores. Estas personas tratan literalmente a cientos de instancias reservadas a lo largo de su carrera y saben lo que están haciendo.

No obstante, recuerde que aunque la mayoría de los casos de IR en mascotas son bacterianos y muy tratables, un pequeño porcentaje son de origen fúngico o viral y mucho más difíciles de curar.

Tratamiento a domicilio:

Los dueños de mascotas a menudo se sienten tentados a probar el tratamiento en el hogar para las enfermedades de los reptiles, y quién puede culparlos: ¡es fácil dejarse atrapar por recursos que le dicen que se salte un viaje a los veterinarios!

El problema con esto es que simplemente no hay sustitutos para los antibióticos, y estos a menudo son esenciales para eliminar una IR bacteriana.

Incluso si puede conseguir algunos antibióticos, la dosis puede ser complicada y la experiencia de primera mano que tienen los veterinarios no tiene precio.

Tendrán acceso a una variedad de medicamentos, sabrán cuál será el más eficaz para su especie de mascota y sabrán cómo calcular la dosis correctamente. En pocas palabras, siempre se recomienda un tratamiento veterinario para una IR.

Entonces, ¿qué podemos hacer en casa? Bueno, hay algunas cosas que puede hacer para mejorar las probabilidades:

Aumente la temperatura del lugar para tomar el sol en alrededor de 5F (2.7C), ¡incluso si sus temperaturas fueran correctas para empezar! Los reptiles corren en celo; un aumento como este puede ayudar a fortalecer su sistema inmunológico.

Crea un ambiente más limpio. Cambie el sustrato y el agua cada pocos días.

Aumente la ventilación. Esto puede ser tan simple como abrir la ventana durante una hora dos veces al día. ¡Asegúrate de no sacrificar el calor!

Minimiza el estrés. NUNCA se debe manipular a un animal enfermo, ¡incluso si anteriormente disfrutó de la interacción!

Cómo prevenir las infecciones respiratorias

La prevención implica examinar los problemas de cría que causan las IR y aprender a regularlos.

Temperatura:

Cada especie de tortuga tiene un rango específico de temperaturas que la ayudan a funcionar con normalidad. Además, puede necesitar un gradiente de temperatura, esto significa un final frío y un final cálido.

Investigue esto leyendo las hojas de cuidados para su especie específica, luego pruebe el punto de calentamiento de su recinto y las temperaturas del lado frío con una pistola de termómetro infrarrojo, la temperatura del aire con un termómetro digital y el agua con un termómetro de acuario sumergible.

Si su casa se enfría mucho por la noche, será importante que también controle la temperatura del aire durante la noche. No lo olvide: una caída repentina de la temperatura puede provocar la aparición de un IR, ¡así que esté en guardia después de un corte de energía!

Dieta:

La deficiencia de vitamina A es otra causa principal de IR, así como de abscesos auditivos y pudrición bucal.

Para obtener información sobre cómo prevenir la deficiencia de vitamina A, consulte Turtle Swollen Eyes y Vitamin A artículo deficiencias. Un segundo problema dietético es la obesidad.

Las tortugas con sobrepeso llevan demasiada grasa en la cavidad de su cuerpo, lo que ejerce presión sobre el sistema respiratorio y lo hace más propenso a las infecciones.

Si su tortuga parece que no puede retirarse a su caparazón sin que le salga mucha grasa, ¡probablemente necesite reducir sus porciones!

Higiene:

Una higiene excelente significa un trabajo fácil para el sistema inmunológico de su mascota. Retire los alimentos y las heces no consumidas inmediatamente y cambie el sustrato con regularidad.

Para las especies de tortugas acuáticas, existen varias opciones para mejorar la higiene del agua.

Los aditivos que introducen bacterias saludables pueden funcionar bien, al igual que los filtros esterilizadores UV (asegúrese de que tengan un protector para proteger los ojos de su mascota). Junto con la limpieza, la ventilación es un componente esencial de la higiene.

Asegúrese de que haya un flujo de aire adecuado alrededor del recinto de su mascota para ayudar a disminuir los gérmenes en el aire.

Profundidad del agua:

La profundidad incorrecta del agua puede provocar ahogamiento, seguido de muerte o neumonía.

Para las tortugas bebés, el agua poco profunda les permite alimentarse sin agotarse y disminuye el riesgo de ahogamiento.

Para las mascotas mayores y más pesadas, asegúrese de que la profundidad del agua sea al menos el doble del ancho de su caparazón para que puedan enderezarse fácilmente si se voltean.

Para bebés y adultos, asegúrese de que sea fácil para ellos trepar a las áreas para tomar el sol.

Humedad:

La alta humedad puede provocar IR en los quelonios terrestres, especialmente en especies del desierto como la tortuga de caja del desierto (Terrapene ornata luteola).

En el caso de especies tropicales como la Matamata acuática (Chelus fimbriata), respirar aire demasiado seco también puede afectar la salud pulmonar y provocar infecciones respiratorias agudas.

Cuarentena:

Aunque la mayoría de los casos son de hecho bacterianos, los recién llegados pueden introducir RI virales a sus mascotas.

Siempre que tenga una nueva mascota, colóquela en cuarentena en una habitación / área separada durante al menos un mes y nunca use los mismos utensilios de alimentación para ella.

También es importante nunca compre wild caught animales, ya que son más propensos a transmitir enfermedades.

Terminando

Las infecciones respiratorias son comunes en las tortugas mascotas. Pueden manifestarse como secreción nasal o neumonía en toda regla. Afortunadamente para nosotros, la mayoría de ellos son bacterianos y altamente tratables si se detectan en las primeras etapas.

Para aquellos casos de origen fúngico o viral, el tratamiento puede ser mucho más difícil, pero la prevención puede ser sencilla.

Como era de esperar, la prevención de todos los tipos de IR se reduce a crear las condiciones que su mascota necesita para prosperar. Si investiga a fondo los requisitos de cría de su mascota, puede hacer que una infección respiratoria sea extremadamente improbable.

Como siempre, comenta o ponte en contacto para obtener más ayuda y consejos.

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