Artículo de María Palmero, tomado de El Confidencial.com
Una concursante rodeada de serpientes en el concurso. (Cuatro)
Las quejas de los televidentes se centraron en el papel que cumplieron los animales. En una de las pruebas, los azafatos echaron serpientes en un cubo de agua en el que estaba una concursante, para luego lanzar una Python de tamaño gigante. En otra, una mofeta estaba encerrada en un cubo transparente, en el que tenía que meter la cabeza el concursante; las gallinas jugaron el mismo papel que esta última. En otra, a un participante le llovieron saltamontes, ciempiés y gusanos, que le fueron lanzados en cubos. En otra, una concursante pisaba cajones repletos de gusanos y un caimán...
"Es una forma de maltrato animal"
A las quejas de los usuarios en Twitter se unieron después las asociaciones. Para Javier Moreno, portavoz de Igualdad Animal, lo que ocurrió en el programa fue "vergonzoso, una falta de respeto y de maltrato animal". "Que en el s.XXI se sigan empleando animales en este tipo de concursos de televisión es increíble", asegura Moreno.
Para Carmen Méndez, presidenta de Asociación Defensa Derechos Animal (Adda), "es una forma maltratar y tratar a los animales como juguetes y objetos". Méndez critica que se los caricaturiza y se les expone. "Estas prácticas se deberían prohibir", sentencia.
El programa se defiende
Tras las críticas, Cuatro colgó este jueves en su web una entrevista con Miguel Ángel Jorquera, el responsable de los animales del concurso. Jorquera, que lleva más de diez años trabajando como conservador en varios parques zoológicos, asegura que elaboran un programa para evitar cualquier daño al animal, y que se fijan en la selección de especies, el diseño de prueba y el calendario de rotaciones y descansos.
"La selección de especies es muy importante. Por ejemplo, en la cámara de gusanos que los participantes pisan, además de una protección de gomaespuma, buscamos los invertebrados más resistentes. En total usamos 300 gusanos y 200 cucarachas. Hemos hecho la prueba 8 veces y no hemos tenido ninguna baja", apunta.
Por otro lado, el estrés en los animales es entendido como un tipo de maltrato. Ante esto, Jorquera apunta que tienen controles veterinarios antes, durante y después de las pruebas y que nunca han tenido ningún estrés con los animales.
¿La seguridad es suficiente?
El hecho de que haya un encargado que vele por la seguridad y bienestar de los animales no significa nada para los defensores de estas especies, ya que el simple hecho de que estos sean usados como objetos es denunciable para ellos.
"El hecho de que haya animales en un concurso es una forma de maltrato animal. Y más en una época en la que se están extinguiendo las especies y que se aboga tanto por la defensa de los no humanos", apunta Méndez, que apuesta por hacer concursos sin animales, ya que "nos lo podemos pasar igual de bien".
En la misma línea se mantiene Moreno, quien espera que tanto este concurso como los demás que emplean animales de esa forma, sean retirados de la parrilla.