Lo que está claro es que estas razas existen porque el ser humano las ha creado. Ninguno de los perros braquicéfalos eran así originariamente. Han sido modificados cría tras cría hasta conseguir que fueran estéticamente “vendibles”, es decir, cuanta más demanda, más negocio, sin tener en cuenta los problemas que estos perros sufren diariamente debido a esta cría sin sentido, y para ejemplo, estas imágenes.
Así era el Bulldog Inglés originariamente allá por el siglo XVII, y así es como el ser humano lo ha acabado diseñando. No tiene nada que ver uno con el otro. El Bulldog Inglés de ahora lo han modificado tanto que es la raza de perro con más problemas de salud: su hocico es tan chato que apenas pueden respirar, su cabeza es tan grande que prácticamente todos deben nacer por cesárea, prácticamente la mayoría sufre de displasia de cadera y su esperanza de vida es de tan solo 6 años. Pero 6 años de sufrimiento: colapsos, apneas, síncopes, hipertermia, cianosis, emesis, queratoconjuntivitis seca, estenosis pulmonar, defecto ventricular septal, y un largo etcétera de problemas dermatológicos, oculares, cardiovasculares, neurológicos, renales, etc.
Otra raza muy de moda últimamente es el Bulldog Francés. Una raza bastante más nueva que la anterior (casi entrando en el sigo XX) por lo que los cambios que se han producido en la misma no son tan notables como el del Bulldog Inglés. Aún así, vemos cómo se ha achatado el hocico de forma considerable, la mandíbula que sobresalía ya no lo hace y se ha menguado el tamaño haciéndolo más tosco y más compacto. Esto ha provocado que las enfermedades comunes de esta raza se deban a malformaciones en su columan vertebral o de esófago dilatada, además de problemas respiratorios, pero también, dermatitis atópica y sobretodo problemas oculares: cataratas, glaucoma, conjuntivitis, etc.
¿Y qué decir del carlino? El carlino es una de las razas más antiguas que existen, eso sí, nada tiene que ver el de ahora con su antepasado. Mucho más compacto y pequeño, con la cola más enroscada y el hocico totalmente hundido en la cara. Todos estos cambios han provocado que el carlino, como las dos razas anteriores, sufra de problemas respiratorios, lesiones oculares, problemas de alergias, propensión a la inflamación de las glándulas anales, etc.
Este grupo de veterinarios se ha propuesto luchar para acabar con la cría de estas razas como son ahora debido sobretodo a los problemas que les supone tener el hocico tan achatado que provoca en todos ellos el síndrome braquicéfalo. Este síndrome común en todas estas razas condicionará su salud durante toda su vida, es por eso, que instan a todas las personas a que eviten adoptar estas razas solo por gusto estético, teniendo conocimiento de todos los problemas de salud a los que va a tener que hacer frente el perro y el bolsillo de su dueño ante constantes visitas al veterinario.
Diariamente conozco a personas que se lamentan de haber adoptado a estas razas, no porque no quieran al perro, sino por la impotencia que padecen al no poder ayudarles a sanar o reducir el padecimiento que sufren. ¿No sería mejor dejar de alargar la agonía de estas razas y depurarlas para liberarlas de tantas enfermedades?
Sandra Ferrer. Creadora del Programa de Educación Canino “Cómo Educar a un Cachorro”
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