Candace Alessa
La Asociación Parlamentaria en Defensa de los Animales (APDDA), coordinada por el ex diputado Chesús Yuste, celebró el pasado 24 de abril en el Congreso de los Diputados un foro de debate al que invitó a gestores municipales, técnicos y responsables de bienestar animal, así como a entidades de todo tipo dedicadas a la gestión de colonias felinas. De allí salió un decálogo para mejorar el bienestar de los gatos que comparten con los humanos las calles.
Se trata del primer ?Manifiesto Felino? presentado en una sede parlamentaria, que aspira a orientar a las administraciones públicas y a los ciudadanos para conseguir una coexistencia ética y satisfactoria con las colonias de gatos, y que está avalado por expertos de toda Europa. Una vez presentado, ha quedado abierto a las adhesiones de quienes quieran compartirlo y de quienes se comprometan a aplicarlo desde sus competencias públicas.
El debate en el Congreso de los Diputados permitió poner en común distintas experiencias y definir unas líneas básicas sobre las que establecer el diálogo con las administraciones. Existen poblaciones en España donde incluso se ha reconocido el estatus de los gatos callejeros y se financia, con muy buenos resultados, la esterilización de los felinos. En otros muchos lugares, el acercamiento entre gestores de colonias y responsables públicos está permitiendo avanzar en políticas que benefician tanto a los gatos como a los humanos.
Agnès Dufau presentó el Manifiesto en el Congreso de los Diputados. Como consultora de bienestar animal, su empeño es conseguir una mejor vida para los felinos que habitan en pueblos y ciudades, y por ello le concedieron el Premio Internacional de Bienestar Felino.
Decálogo:
Identificación y registro obligatorios de los gatos.
Reconocimiento de la especificidad de los gatos ferales y reconocimiento de la obligación de protegerlos.
Reconocimiento del CES (captura, esterilización y suelta) como el único método aceptable para la gestión de la población de gatos sin propietario.
Aplicación de la legislación que ponga fin a la impunidad de las conductas infractoras y delictivas contra gatos y colonias felinas.
Prohibición en todo el Estado de la desungulación y otras mutilaciones.
Obligatoriedad de la esterilización de todos los gatos, excepto para los criadores profesionales.
Mejora en la implementación de la normativa de cría y venta de gatos.
Inclusión de la tenencia responsable de gatos en las campañas públicas de bienestar animal.
Inclusión del bienestar animal dentro de los programas oficiales de educación básica.
Etiquetado de los productos veterinarios tóxicos para gatos para evitar envenenamientos.