Una de las situaciones que muchas personas deben saber sobre sus mascotas, en especial de sus caninas, es el embarazo psicológico en perras. Este evento que ocurre en los humanos, es una circunstancia que aunque no es inusual, es importante que tenga la atención de sus cuidadores. Es decir, de sus humanos.
Tal como lo dice su nombre, el embarazo psicológico, también referido como pseudoembarazo o pseudogestación, produce una serie de efectos en la conducta de las perritas. Estos son también son físicos y visibles. Este proceso se define como la aparición de todos los signos y síntomas de un embarazo verdadero. Puede ocurrir ya sea que se haya apareado durante el celo o no. Su causa está relacionada con la actividad hormonal.
Tras un mes o dos del periodo fértil, las hormonas que intervienen en la fecundación siguen en actividad. Eso hace que aparezcan todos los efectos de un embarazo. Este fenómeno tiene una explicación evolutiva. En las manadas de lobos no solo la madre produce leche, sino que otras hembras, sin crías, también lo hacen. En caso de que la madre de algunos cachorros muera es muy útil que otra madre la pueda sustituir. Así las crías tendrán cuidados, calor, alimentación. Es un mecanismo de supervivencia de los ancestros del perro.
Para los veterinarios no es una enfermedad, de hecho ocurre hasta en un 65% de las perras no esterilizadas. En particular de las que no han tenido crías. Con este alto nivel de incidencia, es visto como algo propio de la especie. Aunque sugieren vigilar al animalito ya que las consecuencias si pueden ser delicadas.
¿Cuánto dura un embarazo psicológico de un perro?
Como mencionamos, la aparición del pseudoembarazo ocurre alrededor de un mes y medio o dos meses luego del tiempo del celo. Las primeras reacciones no serán visibles y habrá que esperar algunas semanas para detectar algún cambio.Existen diferentes criterios entre especialistas sobre la duración del embarazo psicológico en perras. Sin embargo, se estima que se puede extender por un periodo de entre dos a tres semanas. Es decir, que al final de este lapso la conducta y los síntomas finalizarán por si solos.
Esto no ocurre en todos los casos, por lo que solicitar ayuda al especialista no es descartable. Su actuación dependerá de la severidad del caso, será su evaluación lo que indique que debe hacerse. Si todo el proceso se soluciona de manera natural. Es decir con el restablecimiento de la actividad hormonal normal; aún así podrás ver que tu perrita se mostrará poco animada o apagada. Es una respuesta normal por la agitación química que experimentó.
¿Cómo sé si mi perro tiene un embarazo psicológico?
Las características propias de un embarazo, ya sea genuino o psicológico en perros, no son evidentes de manera inmediata. Por lo general pasan semanas para que puedas notarlo. En todo caso las manifestaciones son tanto físicas como de conducta.En cuanto a los cambios físicos podrás ver un aumento en el tamaño de las mamas. Se pondrán hinchadas. Aparece también líquido muy similar a la leche cuando da de amamantar, aunque más acuosa.
Hay cambios en las dimensiones del abdomen, que puede tornarse un poco duro y más grande.
Es factible que aumente de peso, aunque se observen cambios en el apetito. De hecho mostrará menor interés en la comida
Pueden aparecer náuseas y vómitos.
Aparece un flujo blanquecino o rosado en la vulva.
Prepara el sitio cálido y apartado del movimiento en casa. Algo que haría como si fuese a parir.
En algunos casos puede experimentar problemas estomacales como diarrea.
Utiliza juguetes o un objeto preferido que carga y cuida, como si fuese una cría. Es una especie de adopción.
Hace ruidos como de quejidos.
Tendrá cambios en su energía. Se comportará más calmada quieta, menos dispuesta a los juegos.
Hay casos en los que puede reaccionar con cierto de nivel de agresividad.
Estos son algunos de los indicios que aparecerán en perrita. Ahora bien, si no ha sido montada y aparecen estas señales, es claro que se trata de un embarazo psicológico en tu perra. La recomendación es que si estas señales las dos o tres semanas acudas al veterinario.
¿Qué ocurre durante la pseudogestación de una perrita?
Para saber qué ocurre en este proceso hay que situarse en el final del celo. Al culminar ese proceso, en el ovario se produce un quiste, una pequeña protuberancia. Esta se denomina cuerpo lúteo. Si no hay embarazo, desaparece en un proceso natural del organismo. En cambio si ocurre la fecundación, el lúteo generara una hormona, llamada progesterona, necesaria para el embarazo.En los pseudoembarazos el cuerpo lúteo sigue activo. Lo que significa que la dinámica hormonal se mantiene como si hubiese un embarazo real. A esto se suma otra hormona, la prolactina que estimula la producción de leche materna, entre otras funciones. Así se dan todas las condiciones para la pseudogestación de una perrita.
Con todo este proceso químico en marcha, se hacen visibles las modificaciones anatómicas y de conducta del embarazo psicológico. Por ahora la ciencia no ha determinado porque este proceso genera reacciones en unos ejemplares y en otros no.
Hay casos en los que se ha observado que las perritas experimentan contracciones. Tal como si estuvieran en proceso de parto.
Recomendaciones durante un embarazo psicológico en perras
Una vez que se ha detectado que se trata de un embarazo psicológico de una perra, hay varias disposiciones que puedes tomar para hacerla sentir mejor.El paso clave es evitar que siga actuando de modo maternal. Este comportamiento estimulará las hormonas y se podría volver grave la situación. Entonces ¿cómo hacer que cambie de conducta?
Hay dos tareas básicas, no permitir que siga creando el nido o sitio de parto. También se debe evitar que adopte ningún juguete como si fuese una cría. Para distraer a tu perrita es muy favorable que hagas actividades físicas. Paseos, juegos, el ejercitarse hará que disminuya la atención a su falso embarazo.
Siempre siguiendo las instrucciones profesionales, es posible que se recomiende reducir la cantidad de agua, así como la presencia de hidratos de carbono en la alimentación. Otra acción que se debe modificar, en caso de que se haya presentado es que se lama las mamas. Esa acción estimula la producción de leche.
En caso de que sea recurrente, se podría considerar permitir que la perrita tenga su camada. Tener crías podría evitar que se repita el pseudoembarazo en el futuro. Una opción definitiva podría ser considerar la esterilización o la castración.
Son dos procedimientos diferentes. La castración es una cirugía en la que se extraen del perro, macho o hembra, las glándulas sexuales. En el macho, los testículos; en la hembra, los ovarios. Con esto ya no habrá más actividad sexual. Es decir el macho no montará, ni la hembra entrará en celo. La castración influye en la conducta, ya que la agresividad se reduce, así como otras conductas dominantes. La esterilización se limita a la capacidad de reproducción. De tal manera que ya no sea fértil, aunque el instinto reproductorio se mantenga.
Tratamiento de mastitis en perra con embarazo psicológico
Una de las consecuencias más indeseables es la mastitis en perras con embarazo psicológico. Una situación que sí requiere atención. La mastitis es una infección que ocurre en las glándulas mamarias de la perrita. Los conductos de la leche, dentro de las glándulas, se obstruyen. Los síntomas de este trastorno son hinchazón en las mamas, que además se vuelven sensibles, y genera dolor.Una acción que puedes tomar, para evitar que aumente la producción de leche, es impedir que se lama las mamas. Tal como lo mencionamos antes.
Lo más recomendable es que acudas al veterinario, quien le hará diferentes exámenes. Análisis de sangre, una revisión física para determinar el tratamiento a seguir. De acuerdo a los resultados, podría recetar antibióticos o en casos extremos, hacer una cirugía. En algunos casos podría requerir un medicamento que controle las hormonas.
Apoyar a tu mascota ahora es más fácil con toda esta información sobre el embarazo psicológico en perros. Esperamos que te sea muy útil y sirva para que tu perrita tenga una vida sana y feliz.