El FUS (o FLUTD) es el síndrome urinario felino, un conjunto de síntomas como sangre en la orina (hematuria), dolor al orinar (estranguria), aumento en la frecuencia de micciones (poliaquiuria) llegando incluso a la incapacidad de orinar (anuria). Engloba muchas enfermedades el aparato urinario inferior y causa irritación en la mucosa de la vejiga y de la uretra, y es un síndrome peligroso que puede llevar a la muerte.
Entre las posibles causas está la aparición de cálculos urinarios, infecciones, malformaciones, tumores, golpes o puede no tener una causa explicable.
Además de los síntomas que hemos dicho antes, podemos observar también en un animal con FUS una pérdida de apetito, vómitos, aumento en la salivación, respiración agitada y, quizá lo más curioso, es que el aliento les huele a pis.
Aunque es más común y grave en gatos machos y adultos, cualquier gato puede sufrir un FUS. Las probabilidades aumentan si le damos un pienso de mala calidad, que no tenga el 012% en magnesio, si no tomen comida húmeda y si no beben agua. También la castración se considera un factor agravante de esto y, especialmente, el estrés.
Los gatos son unos animales muy rutinarios y fácilmente "estresables", aunque ya hablaremos de ello más adelante. Una bandeja sucia, más animales en casa, visitas, mudanzas o un nuevo inquilino puede ser causante de un aumento del estrés.
Si bien nunca podemos asegurarnos al 100%, debido a que algunas causas son imposibles de controlar, sí que podemos tener en cuenta lo siguiente; el agua es positiva siempre en estos casos y actualmente hay en el mercado unos modelos de bebederos, mejor dicho de fuentes, con las que los gatos disponen de agua fresca y limpia favoreciendo así su consumo. Piensos de buena calidad y balanceados adecuadamente, un número de areneros igual al número de gatos más uno extra, evitar situaciones de estrés y controlar el peso son cuestiones esenciales para prevenir el FUS.
Qué hacer dependerá del grado y del juicio veterinario, lógicamente, pero podemos encontrarnos desde un tratamiento con antibióticos, diuréticos y fluidoterapia hasta, simplemente, utilizar un pienso urinario.
¿Cuándo acudir al veterinario? Si ves que tu gato hace pis en otros lugares distintos a su arenero, se arquea y grita al orinar porque le duele, tiene el abdomen hinchado, vomita, no come, le huele el aliento a amoniaco...ante cualquier mínima duda, pide cita y que le hagan una revisión. No te la juegues ;)