El variable periodo de adaptación del perro adoptado
Lo primero que queremos dejar claro sobre el periodo de adaptación de un perro adoptado es que cada caso es un mundo y que esos 2 meses que tarda un perro recién adoptado en estabilizarse es un número orientativo.
La razón es sencilla: los perros son seres vivos tan únicos como nosotros y cada uno de ellos carga con una historia vital diferente, un pasado más o menos complicado que puede ampliar o reducir el lógico periodo de adaptación del perro a su nueva familia humana.
¿De qué depende que el perro tarde más o tarde menos en digerir el vuelco que le ha dado la vida? De muchas y muy variadas circunstancias como, por ejemplo, las siguientes:
Edad del perro
Los alegres cachorros suelen adaptarse rápidamente a un nuevo entorno ya que apenas recuerdan o echan de menos a su familia humana anterior, no han sufrido las consecuencias de una socialización incompleta, inexistente o ineficaz, no han tenido tiempo de vivir malas experiencias, etc. Por el contrario, los perros más mayores cargan con una mochila de experiencias no siempre positivas que pueden alargar esos dos meses aproximados de adaptación.
Estado de salud del peludo
Un perro adoptado que llega a casa con tos de la perrera, diarrea crónica, otitis, etc., tendrá un periodo de adaptación más largo. La razón es obvia: si el perro sufre dolor o se siente débil, la novedad de conocer gente nueva, los cambios en la alimentación o los aromas de su nuevo hogar le supondrán una carga difícil de asimilar.
Estado emocional del perro adoptado
Como desgraciadamente sabemos todos, muchos de los perros en adopción han sido abandonados por su familia humana y este hecho tiene unas consecuencias emocionales terribles para el perro: desconfianza, miedo al coche o a quedarse solo, apatía, agresividad… ¿Podemos corregir ese estado emocional del peludo? Por supuesto que sí, pero tenemos que ser conscientes de que el periodo de adaptación se alargará algo más y que tendremos que desplegar todo nuestro encanto y saber hacer perruno.
En definitiva: el periodo de adaptación al hogar de ese cachorro o perro adulto que acabas de adoptar puede ser más o menos largo; lo importante es que esa adaptación a la nueva vida del perrete se desarrolle de la forma más sencilla, placentera y gratificante para toda la familia.
Consejos para facilitar el periodo de adaptación del perro adoptado
Hay varios consejos que te ayudarán a afrontar el periodo de adaptación con el menor estrés posible (tanto para ti, como para tu nuevo amigo). Toma nota:
Prepara el hogar antes de que llegue el perro adoptado
Antes de ir a recoger al nuevo miembro de tu manada, prepara un rincón especial para él o ella, un espacio propio con su camita, su bebedero, su manta, algún juguete… Un espacio de calma donde tu compañero peludo se sienta lo más seguro posible.
Asegura el entorno
Si vives en una finca o en un chalet con terreno, revisa bien que no haya agujeros o espacios por donde pueda colarse el perro. Un perro adoptado con dificultades de adaptación no dudará en abandonar una casa que todavía no considera su hogar.
Tómate las cosas con calma
Tanto los cachorros como los perros adultos que están en adopción no suelen estar educados para convivir en un hogar, no saben, por ejemplo, que no deben orinar en casa, robar la comida de la mesa o ladrar como locos cuando suena el timbre. No te preocupes. Todos los perros se pueden educar con tiempo y paciencia. Y si necesitas ayuda, no lo dudes, contacta con un buen profesional que te ayude a conocer, querer y socializar a tu nuevo compañero de vida, ese perro adoptado que necesita todo tu apoyo sobre todo en esos dos primeros meses de adaptación.
Fuente: este post proviene de Sentido animal, donde puedes consultar el contenido original.
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