Una cosa tiene que estar clara: sea el perro más o menos enérgico, es decir, más pasivo o más activo, necesita salir de casa. Muchos propietarios creen que porque tienen jardín no hace falta sacar a los perros. Ni aún teniendo una parcela de 5000 metros cuadrados, un perro debe quedarse siempre metido dentro. El perro necesita correr, oler nuevos entornos, explorar, interactuar con otras personas y con otros perros, conocer y descubrir nuevos ambientes… No podemos convertir nuestro hogar en una cárcel para el perro.
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Dicho esto, y yendo a la pregunta, ¿cuánto ejercicio necesita hacer mi perro? La persona que mejor puede contestar a esta pregunta es un veterinario. Este profesional podrá garantizarte que tu perro está en perfecto estado y podrá asesorarte sobre los mejores ejercicios para él, ya que cada raza tiene sus necesidades.
Por ejemplo, los perros de trabajo, como el Pastor Alemán o Australiano y todos aquellos cuya función de trabajo era cuidar del ganado, necesitan un alto nivel de actividad física. Otras razas, por el contrario, como el Bulldog Francés o el Pug o Carlino, no necesitan tanto ejercicio, y puede ser contraproducente ejercitarlos en exceso sobretodo en días de mucho calor.
Tu veterinario también te informará del ejercicio que debe hacer tu perro según su edad. Así como en cachorros el ejercicio debe ser moderado, en cuanto empiezan a ser adolescentes necesitarán grandes dosis de ejercicio y juegos. En cambio, a medida que vayan envejeciendo, los requerimientos de actividad física serán cada vez menores.
La mayoría de los perros necesitan entre 30 y 60 minutos de ejercicio moderado al día. Este ejercicio moderado puede consistir en un paseo rápido, correr en algunos tramos e incluso realizar algunas sesiones de juego con la pelota, frisbee, etc.
Para saber exactamente cuánto ejercicio diario necesita tu perro, tan solo tienes que observarlo: atiende a señales como cansancio que lo notarás si tienes que tirar de él con la correa, o directamente se tumba en el suelo, los jadeos, o que quiere ir más despacio. Por el contrario, si tu perro no está recibiendo suficiente ejercicio físico, también podrás observar varias señales: puede ganar peso, no parar de correr ni de jugar dentro de casa, puede manifestar ese sobrante de energía con conductas inadecuadas como morder cosas dentro de casa, ladrar excesivamente, hacer hoyos en el jardín, romper mobiliario, etc.
Hay muchas maneras de proporcionar a tu perro ejercicio, no todo lo tienes que limitar al paseo diario. En este sentido, alterna diversas actividades físicas: correr, nadar, practicar flyball, hacer senderismo, ir a un parque canino, jugar, etc. Y en caso de no poder salir debido al mal tiempo, nada que una buena sesión de juegos en casa no arregle. Para perros de raza mediana y grande (Labrador, Pitbull, etc.) muy enérgicos que necesitan quemar mucha energía, es recomendable añadir en los paseos una mochila, así el paseo se realiza con mayor eficacia.
Si aún te estás preguntando si tu perro está haciendo el suficiente ejercicio físico, no dudes en acudir a tu veterinario para hablar de ello. Nadie mejor que él para ayudarte a conocer las necesidades individuales de tu perro.
Sandra Ferrer. Creadora del Programa de Educación Canino “Cómo Educar a un Cachorro”
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