De acuerdo a los entrenadores y psicólogos de perros más experimentados en el tema, las mascotas representan un refugio para nosotros los humanos, es por eso que debemos procurar regalarles un poco de calma y paz durante algunos momentos. Masajear algunas de sus zonas más “estratégicas”, despertará en ellos algunas sensaciones que le recordarán el propio seno materno.
El yoga para perros o yoga canino
El ejercicio más recomendado en el Yoga para perros es el dar un leve y suave masaje tanto en las sienes como en la cabeza de nuestra mascota, este masaje debe realizarse de forma circular para que ayude a relajar y despejar las tensiones que se encuentran acumuladas.
Al cabo de unos minutos puedes pasar a acariciar sus orejas, pues esta zona se encuentra llena de terminales sensoriales, les puede colmar de gran paz y tranquilidad el hecho de percibir una “terapia de caricias”.
A continuación, puedes continuar pasando la palma de tu mano de forma firme iniciando desde la base de su cabeza, luego pasando por el cuello hasta descender y finalizar en la columna. Este tipo de movimiento les hará recordar la lengua de su madre, por lo tanto, les llena de mucha confianza.
Así mismo, puedes estirar las patas de tu perro tomándolos desde la parte posterior para mover de forma suave sus articulaciones; como último paso puedes sostenerlo de la cadera levantando sus patas traseras logrando que su columna vertebral se relaje al estirarse.
Natación para perros
Durante la época de vacaciones y con el fin de que tu perro rompa esa aburrida rutina diaria y se refresque, puedes llevarlo a tomar clases de natación, la cual se convierte en una excelente y novedosa alternativa para todos aquellos que por nuestras ocupaciones no tenemos tiempo suficiente para sacar a pasearlo, pero deseamos adoptar una rutina de ejercicios para nuestra mascota.
Esta nueva modalidad de ejercicios para perros nació en Estados Unidos, y de seguro hará rebosar a tu amigo de felicidad sin importar su edad o tamaño ya que de seguro se divertirá por montones en una piscina. Durante estas clases acuáticas, tu perro puede perder el miedo al agua, refrescarse, aprender a nadar y también relejarse puesto que dos horas de correr sin parar equivalen a media hora en el agua.
La mecánica utilizada en esta modalidad de ejercicio es igualmente entretenida para el dueño ya que lanza una pelota a la piscina para que su perro se lance a y vaya nadando hasta ella. Lo mejor de esta novedosa experiencia acuática es que al final de la clase nuestro perro queda exhausto pero muy relajado, tranquilo y de buen humor, lo que convierte a la natación en uno de los mejores ejercicios para nuestra mascota.