Es muy usual que a los que tenemos gatos como mascota nos guste acariciarlos tranquilamente, pero en algunos casos esos momentos de relajación pueden terminar convertidos en toda una pesadilla cuando de forma repentina nuestro amado gato nos ataca y sin mediar palabras nos araña o muerde.
En mascotafiel.com te daremos toda la información acerca de estos hermosos animales, todo acerca de su alimentación, costumbres y cuidados, así que si eres un amante de los gatos no puedes perderte nuestros post, que están hechos con todo el amor para estos maravillosos mininos.
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Porque hay gatos que atacan a sus dueños. Razones de este comportamiento errático.
La gran mayoría de los ataques tiene lugar cuando acariciamos a nuestro gato o cuando estamos jugando con él, sin embargo algunos dueños temen a los ataques del felino incluso cuando ven televisión o cuando duermen, este tipo de ataques y su gravedad varía mucho en cada caso.
Antes de legar una apresurada conclusión y decir que el gato es agresivo por naturaleza, debemos entender la causa de este tipo de ataques de agresividad, nosotros te traemos en esta oportunidad 8 razones por la cual tu gato puede atacarte, si tienes mininos este artículo esta hecho especialmente para ti.
1.- Agresión por problemas médicos.
Si notas un comportamiento agresivo repentino en tu gato, algo que debes hacer en primer lugar es llevarlo al veterinario, de esta manera podamos descartar cualquier problema de salud que pueda tener. Es posible que la rabia o un factor hormonal puedan desencadenar un comportamiento agresivo, no obstante uno de los problemas de salud más frecuentes en despertar este tipo de comportamiento en los gatos es la artritis.
Muchos gatos con problemas neurológicos, suelen tener estados de agresividad debido a un dolor intenso, si el examen físico de tu gato no arroja alguna luz sobre el problema, entonces se deben realizar radiografías que puedan aclarar lo que realmente le sucede a tu minino.
2.- Agresión por juegos.
Los gatos son animales depredadores por naturaleza y es algo innato en ellos realizar conductas de juegos cuando son cachorros, de esta manera pueden entrenarse para la futura caza de presas reales. Por lo que es normal ver a un gatito atacar las manos o los pies de su dueño, sin embargo cuando son bebés es algo tierno pero puede convertirse en un problema si continúa esta actitud en la etapa adulta.
Es común que sean los propios dueños quienes les hayan enseñado ese tipo de conducta, cuando el gato es pequeño se juega con él moviendo las manos los pies para que este los ataque, es posible que sea porque se ven muy tiernos, no obstante este tipo de conducta se mantendrá incluso en la etapa adulta, y no lo hará ni por maldad ni diversión, sino simplemente porque puede hacerlo.
Otra causa de ataque del gato puede referirse al aburrimiento, para ello se recomienda que se use juguetes diseñados especialmente para ellos, y no con nuestros pies o manos. Si no jugamos de forma frecuente con nuestro gato, es posible que cuando deseemos jugar con él se encuentre sobre excitado y que nos ataque con exceso de energía.
3.- Agresión por miedo.
Si el gato toma una posición agachada con las orejas hacia atrás y la cola curvada, es sinónimo de miedo, un minino asustado tiene tres opciones huir, inmovilizarse o atacar. Si el gato se ve sin escapatoria y la amenaza sigue presente es muy posible que este ataque, un gato que no haya sido socializado de manera adecuada cuando tenía las 12 semanas, pues es posible que desarrolle una personalidad desconfiada y con miedo a los humanos.
Sin embargo esto no es exclusivo, ya que un gato perfectamente socializado puede atacar cuando está en un nuevo entorno o en presencia de un nuevo objeto que puede asustarlo como un secador de cabello en funcionamiento o un pepino a lo cual los gatos le temen de forma sorprendente.
4.- Agresión territorial.
Un gato puede atacar a una persona para defender una zona que considera de su propiedad, puede ver al humano como una amenaza al querer quitarle algo que le pertenece por naturaleza.
Este tipo de agresiones suelen suceder hacia los extraños o personas que no son muy recurrentes en la visita al hogar, los gatos que tienen este tipo de conductas suelen orinar en la zona que consideran su terreno para marcarlo.
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5.- Agresión por dominancia.
Hay gatos que actúan con sus dueños como si estos fuesen otros mininos, e intenta dominarlos, para poder estar por encima de ellos en una posición jerárquica dentro del hogar.
Los gatos pueden mostrar sutiles signos de agresividad que los dueños pueden confundir con juegos, más adelante el gato puede gruñir o silbarle al dueño e incluso morderlo o arañarlo. Este tipo de gatos suelen ser muy territoriales por lo que la agresión por dominancia puede ir de la mano con la territorial.
Este fenómeno es muy peculiar ya que consiste en que un gato molesto o estresado por algún motivo no ataca a la persona o animal causante de su enfado, sino que por el contrario ataca a su dueño, este tipo de tensión puede ser acumulada por algún tiempo y suele atacar más tarde al descuido.
La víctima del ataque no tiene nada que ver con su molestia, pero es posible que el gato al ver a su víctima puede volverse a molestar y con ello sus deseos de atacar nuevamente.
7.- Agresión por ya no querer ser acariciado.
Un gato mientras es acariciado puede atacar por dos motivos, una de ellas es porque el gato no ha sido socializado de forma adecuada y no es capaz de distinguir las intenciones humanas tras las caricias. Y dos es que simplemente no está acostumbrado a los mimos y caricias, o es muy sensible y le molesta o causa irritación.
8.- Agresión maternal.
Las gatas cuando se convierten en madres son sobreprotectoras, y si perciben una amenaza puede atacar a las personas o animales en las cuales suele confiar. Esto se debe a los cambio hormonales de la felina la cual es muy intensa las primeras semanas, luego va disminuyendo gradualmente.
Recomendaciones. Es importante acotar que cada caso es distinto por lo que se requiere un maneja en cada caso.
La paciencia es fundamental, trata de poner a tu gato en una situación de miedo o estrés que le provoque este tipo de reacción agresiva.
Utiliza un refuerzo positivo, como las caricias o un trocito de golosina para gatos, cada vez que este se porte bien. Recuerda que las mascotas son parte de nuestra familia, debemos cuidarlos y amarlos, respetarlos y sobre todo tenerlos bajo mucha responsabilidad, ya que dependen de nosotros para muchas cosas, la tenencia responsable es sumamente importante. ¡Adopta no compres!
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