Drako, el último de los cachorros en acogida que queda con nosotros de los cuatro que hemos criado a biberon desde el primer día de vida debido a que fueron abandonados por algún desalmado en una caja frente a un contendor de basura, es el único que falta por salir en adopción.
En fin, dejando atrás nuestra incomprensión de la maldad humana y agradeciendo a todos aquellos que amorosamente han adoptado a cada uno de los cachorrillos, decir que hemos disfrutado muchísimo, aunque a veces haya requerido de demasiado tiempo y energía, como los 10 primeros días de amamantamiento, dando el biberón cada 3-4 horas bajo la alarma del llanto hambriento de los peques.
Era soportable, mucho más cuando muy amablemente, Rocío, propietaria de una web de mascotas llamada galastur-hunde, nos envió de regalo un Nourrinou bibi y pudimos amamantar a los 4 cachorros a la vez, todo un alivio.
Los peques fueron creciendo, y durante las semanas 3-4 se dieron en adopción, y, aunque sé que lo ideal es dejar a los hermanillos juntos más tiempo, temíamos que si lo dejabamos para más tarde no salieran los peques en adopción, ya que, quién nos solicitó que los cuidaramos unas semanas hasta su recogida y reubicación, no mostró demasiado interés en colaborar, así que, sin ningún rencor, nos dispusimos a buscar y seleccionar cuidadosamente a las familias adoptivas.
Lo peor de todo ha sido limpiar las cacas y pipís, normalmente eso lo hace la madre, y, aunque pueda parecer asqueroso, es bastante higiénico.
Hasta ahí todo genial, solo faltaba Drako, el único macho de la camada, un perro muy inteligente y juguetón a la par que serio. Un perro feliz y enérgico fiel compañero de juegos de nuestro pequeño Caniche y que ha sido protagonista de algunos de nuestros vídeos, como este de comida casera para cachorros de 2 meses.
Obviamente, Drako seguía cagando y meando, claro está, y, aunque lo sacabamos al jardín a jugar y hacer sus necesidades, por las mañanas encontrabamos algunos charquitos y pastelitos en el salón. Luego comenzó a depositar sus pipís y cacas en la oficina, ya que hicimos uso de algunos fregasuelos especiales para fregar el suelo que repelieran sus ganas de orinar en el salón.
Con tan solo 50 días, Drako aprendió a sentarse a la orden de sienta, y 20 días más tarde, a día de hoy, atiende inmediatamente a la orden, a su nombre y también viene si lo llamas, es fabuloso. Recientemente, hará dos días, comenzamos a enseñarle la orden tumba y también a ladrar con la orden guau, esta última con muy buenos resultados si teníamos un trozo de carne en la mano xD.
Aquí tenéis un YouTube Short donde se sienta, se tumba y da la pata.
Bueno, sin alargar más nuestro testimonio, volvemos a recalcar el mensaje de agradecimiento a todos las familias adoptivas. Estamos muy felices de que estos pequeños —aunque bastante grandotes— peludos tengan un hogar y el amor que se merecen.
Y bueno familias, esperamos vuestros comentarios y testimonios de como os va con vuestras nuevas mascotas, y por supuesto, también los de todo aquel que quiera dar su opinión o mensaje crítico o de apoyo, abajo tiene la casilla de comentarios.
Drako
Tan solo pedimos difusión para intentar encontrar una familia para Drako.
Gracias.