Claves para la alimentación de un perro anciano
Cuando un perro envejece sus necesidades cambian, es preciso introducir cambios en la comida cuando llegan a los siete años. Con 7 años o más, las necesidades alimenticias de tu mascota no tienen nada que ver con las de por ejemplo un cachorro que está en pleno proceso de crecimiento. La dieta de tu mascota al igual que la de las personas debe cambiar y adaptarse a cada etapa.
Una de las claves importantes es que disminuir la cantidad de grasas en su alimentación. Un perro necesita grasas, proteínas, minerales, vitaminas e hidratos para estar sano. Los hidratos son una fuente de energía fundamental para un perro mayor. Los minerales y vitaminas las utilizará para fabricar los nutrientes necesarios para que tu can esté sano y muy fuerte. Así que para alimentar bien a tu mascota tienes que variar la proporción de esos componentes. Tu perro necesitará grasas para mantener su temperatura corporal estable y protegerse de las temperaturas invernales, además será importante para mantener su pelo y piel perfectos.
Imagen: misanimales.com
En este punto de su vida, tu perro realizará mucha menos actividad física. Empezará a quemar menos calorías con lo que el riesgo de sufrir sobrepeso aumentará debido a la disminución del consumo energético. Es básico que tu perro coma pienso con menos concentración de grasas porque no las quemará con facilidad.
Cómo debe ser la dieta de un perro anciano
La dieta hay que vigilarla porque el exceso de peso aumentará el riesgo de diabetes, o empeore los casos de artritis. Lo ideal es que se reduzcan las calorías un 20%, de hecho existen piensos diseñados para perros senior que cumplirán todas sus necesidades dietéticas. La comida para un perro mayor debe ser baja en calorías y con un elevado porcentaje de fibra saciante.
Otro aspecto fundamental de la dieta es el aporte de proteínas. La vejez suele reflejarse en ciertas señales como canas cerca de la boca, y de los ojos, dificultad para realizar actividad física intensa e incluso problemas para ver o escuchar con claridad. Las proteínas son imprescindibles para contrarrestar el deterioro muscular de un perro mayor, y ayudan a reponer la pérdida de masa. Tu can necesitará estos nutrientes para que el organismo funcione todo a la perfección. Así que opta por una comida de calidad con un aporte entre un 20 y un 3o%de proteínas.
Una recomendación importante es que tu can tome vitaminas. El tiempo puede causar estragos en tu mascota, uno de los síntomas es la pérdida de memoria. Puedes darle una mayor cantidad de vitamina C que retrasará el desgaste cerebral ya que es un eficaz antioxidante. Existen unos lípidos llamados fosfatidilserina que mantendrán la actividad neuronal de tu can. Cuando un perro se hace mayor, sufrirá trastornos del estado de ánimo. Puede que notes a tu perro algo más malhumorado, ingredientes como el triptófano ayudarán a tener controlado el estado de ánimo de tu amigo. Así le ayudarás a estar más tranquilo, a a gusto y dormirá genial.
Cualquier cambio en la alimentación debe ser valorado por tu veterinario. No tomes esta decisión de forma unilateral, ni compres la primera comida que veas. Lleva a tu mascota al médico para que le haga un chequeo, valore sus necesidades y en función de su edad, raza, estado y volumen de actividad física, el profesional te asesorará para hacer un cambio progresivo en su dieta.
Cuida a tu peludo amigo como merece para que tenga una vida larga, sana y feliz a tu lado.
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