Fuente: pxhere.com
En caso de que sea una de aquellas circunstancias en las que nuestro gato requiera de un baño, deberemos tener en cuenta algunas precauciones para llevarlo a cabo.
Si el gato no tiene el hábito de bañarse no hacerlo a menudo
Si el gato es uno que no está acostumbrado a que lo bañen desde una temprana edad, el mismo actuará de forma negativa ante esto. Es por ello que se aconseja que no se lo bañe a no ser que realmente sea necesario. Cuando el animal de verdad esté sucio, para cualquier tipo de exposición, también si es necesario en algún tipo de tratamiento.
De no ser por dichas o similares razones, se recomienda darle tan solo un cepillado diario lo cual bastará para que el pelaje del gato quedé lo suficientemente limpio, habiéndole quitado toda la suciedad sin hacerlo pasar un mal rato.
Consejos para bañar correctamente a tu gato
Utilizar un champú especial
Para bañar a los gatos correctamente se recomienda siempre usar un champú específico para los mismos y no uno de los que usamos nosotros, ya que podría perjudicarlos. A su vez, el lugar en el que vayamos a bañarlo sin duda deberá tener una temperatura templada y adecuada para que el gato no pase frío.
La temperatura del agua es importante
Lo más importante a tener en cuenta en el baño de nuestro gato es el agua y la temperatura de la misma, que deberá ser tibia, es decir, ni demasiado fría, ni demasiado caliente. La fuerza del chorro de agua se aconseja que sea moderada, de modo que el ruido y potencia del mismo no asusten a nuestra mascota.
Bañarlo y enjuagarlo con mucho cuidado
Ya estando preparada el agua con su determinada temperatura, procederemos a mojar con mucho cuidado y paciencia todo el cuerpo del gato. Después deberemos continuar aplicando el determinado champú, dejándolo actuar unos 5 minutos al menos.
Luego de haber esperado ese tiempo lo que haremos será enjuagar el champú con mucha agua, es importante que no queden restos del producto que puedan luego causar molestias al gato.
Secarlo con toallas
Habiendo enjuagado bien el pelaje del gato, procederemos a secarlo lo más posible con toallas, y luego de ello, usando un secador, que es la parte que menos les gusta a los gatos del baño. Esto se debe al ruido y al aire que sale tan bruscamente del aparato, y a veces resulta imposible utilizarlo con ellos y hacer que se acostumbren.
En estos casos lo que se hace es seguir secándolos con toallas lo que más se pueda y luego dejar que el mismo termine por su cuenta.
Siguiendo estos consejos puedes bañar con mayor facilidad a tu gato además de intentar con mayor éxito que la experiencia no sea tan desagradable para él incluso si es de aquellos gatos que no se deja bañarse será más fácil para ti.
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