Si eres propietario de un reptil, sabrás que los grillos son uno de los alimentos con mayor valor proteico para su organismo. Estos pequeños insectos son los más utilizados como alimento vivo. Habitualmente, se compran en tiendas especializadas de animales, pero si quieres puedes criarlos tú mismo.
El más popular es el grillo blanco (Achetus domesticus), aunque algunos criadores se decantan por el grillo negro (Grillus Campestris) o el grillo bicolor (Grillus Bimaculatus). Es cierto que estos animales son más difíciles de reproducir que otros insectos, pero si sigues estos consejos conseguirás buenos resultados.
Alojamiento especial
Guillermo Navarro, criador de grillos, nos explica que antes de pensar en la reproducción, lo primero es buscarles alojamiento. "Lo más apropiado es alojarlos en cajas de plástico o terrarios de cristal, valen las dos opciones".
Es aconsejable empezar con dos recipientes, uno para los adultos y otro para las crías. La única condición en la que tienes que fijarte es que "la altura del recipiente sea lo suficientemente alta como para que no puedan llegar a ella saltando", comenta el experto.
Es importante, que recuerdes que el alojamiento de tus pequeños insectos debe tener suficiente ventilación para que "no se condense agua, por el calor, en las paredes. Esto es fatal para los grillos", afirma Guillermo Navarro. Además nos informa de que la caja que uses no tiene que tener ningún tipo de sustrato, ni tierra, ni serrín.
"Lo más importante, es introducir en el terrario hueveras de cartón, superpuestas una encima de la otra, que es lo que sirve de refugio a los grillos", añade Navarro. En su ambiente natural, estos animales viven debajo de troncos o piedras por lo que obligatoriamente necesitan tener un sitio para esconderse.
Alimenta a tus insectos
Los grillos son animales omnívoros, el alimento que les aportes puede ser variado: salvado de trigo, pan, pienso para cualquier otro animal y, de vez en cuando, puedes darles fruta y verdura. El experto comenta a Mascotasyhogar.com que él da a sus grillos una mezcla de pienso de pollos, salvado de trigo, harina y comida para peces, añadiendo que ¿el tomate les gusta bastante, pero hay que tener mucho cuidado porque los recién nacidos se quedan pegados en él y se ahogan".
La hidratación es importante y aunque haya expertos que afirmen que con el agua que reciben de las frutas y las verduras es suficiente, Navarro aconseja introducir "un bebedero de pájaros" y poner "algodón en la base para que empape el agua y los grillos puedan beber sin ahogarse"
El cortejo y la reproducción
Lo fundamental es tener más hembras que machos. Se aconseja tener alrededor de cinco féminas por cada macho. Una vez que tus grillos ya sean adultos, cuando quieran conseguir una compañera frotarán sus alas delanteras una contra otra y desprenderán un sonido que atraerá a las hembras. Este chirrido es escuchado por ellas a través de sus patas delanteras, que es donde tienen los oídos. A partir de que empiecen a 'crickear' les dejarás un par de días y a continuación, les pondrás los ponederos.
Tras el cortejo, coloca en diferentes partes del terrario unas pequeñas cajas cubiertas de un sustrato que absorba la humedad. Navarro recomienda vermiculita, que se vende en tiendas especializadas de reptiles, aunque también puedes usar arena o tierra para plantas. El recipiente tiene que ser de fácil acceso porque allí es donde van a poner los huevos las hembras.
Generalmente, cuando adquieres hembras adultas casi siempre vienen preñadas, por lo que "en cuanto vean algo donde poner, pondrán huevos¿, explica Navarro. Además, tendrás que reemplazar los recipientes cada dos o tres días, ya que "las otras hembras e incluso los machos pueden estropear los huevos". Una vez que retires los envases, llévalos a otra caja que posea las mismas características tanto de humedad como de temperatura, mientras dure la incubación.
El experto aclara que el único cuidado que necesitarán los huevos antes de romper es que los pulverices con agua, de vez en cuando. Para concluir, el especialista asegura que "a una temperatura de 30 ºC los huevos eclosionarán en unos 12 ó 15 días". Aunque, la cría de grillos al principio parece algo complicada, los aficionados a la misma aseguran que es una experiencia muy interesante y mucho más sencilla de lo que te puedas imaginar.