Tomado de Heraldo.es
Imagen de la "protectora" de animales de Garrapinillos que fue expedientada en
su día por maltrato y por las condiciones de insalubridad reinantes en el lugar.
Una mujer ha sido detenida por agentes de la Guardia Civil y otra imputada por delitos de desobediencia y resistencia a la autoridad presuntamente cometidos cuando los agentes fueron a inspeccionar una finca en Garrapinillos tras varias denuncias interpuestas por maltrato animal.
El suceso se produjo ayer cuando los agentes del Seprona fueron junto con veterinarios oficiales a una parcela de Garrapinillos para realizar una inspección con motivo de varias denuncias recibidas por supuesto maltrato animal en esa finca, donde se encontraron al llegar 11 perros supuestamente sin las debidas condiciones sanitarias, según fuentes de la Guardia Civil.
Se da la circunstancia de que, sobre esa misma finca, pesa un expediente sancionador del Gobierno de Aragón, en el que se prohibía la adquisición de animales en dicho lugar durante 4 años y el cierre de las instalaciones, prohibiéndose la entrada de animales a las mismas, según dichas fuentes.
La propietaria de la finca fue detenida cuando los agentes fueron a decomisar los canes como medida cautelar y comenzó, junto con varias personas allí presentes, a increpar de manera insistente a los agentes e inspectores de la Diputación General de Aragón por los hechos anteriores.
En este contexto fue detenida la dueña de la finca, una mujer de 54 años, cuya identidad responde a las iniciales N.P.G.S., vecina de Zaragoza, con antecedentes penales por tenencia de animales de compañía.
Igualmente se imputó a una segunda persona por un presunto delito de resistencia a Agentes de la Autoridad, una mujer de 47 años, vecina de Utebo.