La faceta más conocida del perro es la de animal de compañía. Existen estudios que aseguran que la domesticación de los mismos comenzó en la Edad de Piedra. Muchos siglos han pasado desde entonces, pero este espacio de tiempo ha sido testigo de la relación de compañía y de confianza que se ha creado entre el hombre y el perro. En la actualidad, el can se ha convertido en el animal más popular de todos los hogares y hoy es conocido como el mejor amigo del hombre. Con todo esto ha llegado nuevas maneras de misión para los perros.
Sin embargo, además del cariño y afecto que proporciona como mascota, es un experto a la hora de ayudar al ser humano en numerosas tareas. Gracias a sus extraordinarios sentidos, a su capacidad y a la disposición que presenta, mediante un adiestramiento adecuado, es capaz de convertirse en una herramienta imprescindible en la vida del hombre. Ayudando a salvar vidas humanas, sirviendo de ojos a personas invidentes, como los perros de asistencia para incapacitados o, simplemente, conviviendo a nuestro lado, el perro se convierte en medicina preventiva, por lo que cuidar y atender a esta especie nos hace más saludables y nos alarga la vida.
Perros de guardia y defensa
Respecto al área de la protección, el rol del perro es muy importante. Existen determinadas razas que cumplen esta función, cada una de ellas cuenta con características particulares, pero igual de válidas para conseguir el cometido. Entre las razas de perros adecuadas para la vigilancia, el Dobermann constituye un excelente ejemplo para cumplir dicha función. "Desconfía de todo lo extraño, por lo que el estado de cautela es infatigable", asegura Mariló Cabello Moreno, criadora y experta de la estirpe. "Es un perro que continuamente está pendiente de su dueño para protegerle de cualquier peligro".Otras razas como el Bóxer, el Ovejero Alemán o el Rottweiler también son ejemplos claros de seguridad y defensa. El pedigrí en perros utilizados para este menester, aunque no es necesario, sí que es muy importante para los adiestradores. Evaluar la línea de sangre les permite conocer las virtudes o los defectos, en el caso de que los hubiera, en el comportamiento del animal.
Perros de búsqueda, rescate y salvamento
Los perros de rescate deben de ser muy mansos, dóciles y sobre todo obedientes. Tienen que tener "buena salud, no ser miedosos y ser muy sociables", informa Castillo, jefe de la Unidad de Perros de Salvamento de Galicia (UEPAS). Tras una catástrofe, se utilizan para salvar vidas humanas que se encuentran entre escombros, bajo el agua o, la nieve. El experto nos comenta que un perro de salvamento es capaz de localizar y rescatar a una persona desvanecida, diez metros bajo la nieve o el escombro.La utilización de estos perros en situaciones extremas es de vital importancia, ya que es "más efectivo que cualquier otro método". Castillo nos describe como un perro de salvamento "hace en 20 minutos el trabajo que un grupo de personas realiza en diez horas". Además, reitera que la duración del trabajo del animal depende de las circunstancias: ¿en un terremoto, por ejemplo, no es aconsejable tenerle más de 20 minutos trabajando. El polvo, el humo, etc., taponan su nariz y el rendimiento no es al cien por cien".
La misión que tienen es la de salvar vidas y, para ello, la educación impartida será estricta pero el adiestrador lo tratará con sensibilidad. Para conseguir el cometido, es necesario que se forme un equipo: el hombre y su perro tienen que conseguir una relación de auténtica complicidad y coordinación. La función del adiestrador es lograr que el animal aprenda jugando. "Es necesaria la motivación", aclara Castillo. Añadiendo que el adiestramiento se basa en "motivación, juego y recompensa".
Es necesario que el animal sepa "localizar, escarbar y señalar el lugar para que el equipo humano de rescate continúe con la misión de salvamento". Cuando se trabaja con ellos, puede utilizar la técnica del rastreo, siguiendo el rastro de una persona o, la técnica de la búsqueda, que se realiza a través del aire, a través de señales olfativas. "Cada persona posee un olor diferente. Un ser humano en peligro, con estrés, ansiedad o, angustia desprende un olor, y a través del aire, el perro puede encontrarle utilizando su olfato". El adiestramiento se hace con diferentes personas. "De lo que se trata es que estos perros sepan distinguir a las personas que se encuentran vivas", concluye Castillo, jefe de la UEPAS.
Perros policía
El can se ha convertido en un compañero imprescindible en los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Cada vez es más habitual encontrar perros en trabajos policiales. Su olfato ayuda a los profesionales a desempeñar su cometido.Rafael Casado, adiestrador de perros utilizados en tareas especiales, nos explica cuáles son los perros que ejercen estas funciones: "necesariamente son perros que se encuentran a gusto en cualquier lado, no les importa el ambiente. Además, son animales muy motivados con el señuelo". Es decir, si se utiliza para la búsqueda de droga o explosivos, su adiestramiento consistirá en poner droga o pólvora en el cebo. Casado explica que "si el gancho es la pelota con la que juega en los entrenamientos, el animal buscará la droga o el olor humano si es para lo que está entrenado, porque en realidad lo que hace es buscar su pelota".
Para este tipo de trabajo es válido "cualquier perro que tenga buen instinto de caza, que le guste seguir el señuelo", asegura el experto. Una buena condición física también es muy importante. Estos perros son auténticos "atletas que se pasan la vida entrenando". El trabajo que desempeñan, "aproximadamente comienza a los dos años de vida y finaliza cuando el animal cumple los ocho años", concluye Rafael Casado. El entrenamiento lo lleva a cabo la propia policía.
Perros-guía
El perro-guía supone una ayuda incalculable para las personas con ceguera. Los invidentes que optan por convivir con uno de ellos, además de disfrutar del mismo como animal de compañía y convertirse en uno de sus mejores amigos, encuentran en el lazarillo la seguridad y autonomía que necesitan para poder desplazarse solos.La Fundación ONCE del perro-guía es el centro responsable de la selección y entrenamiento de estos ejemplares. Está gestionado por la Organización Nacional de Ciegos de España (ONCE). Esta institución trata de convertir al perro en casi una persona y prepararle concienzudamente para su labor al lado de un ciego.
Las razas que más se utilizan son el Labrador, el Golden Retriever o el Pastor Alemán. Los criadores intentan conseguir buenos ejemplares a través de cruces la línea de sangre perfecta. Físicamente, los perros-guía deben tener unas características determinadas, como no sobrepasar nunca la talla mediana, particularidad necesaria para que el manejo sea cómodo para el dueño.También se busca el equilibrio, la sociabilidad y la obediencia.
Es fácil darse cuenta de que el perro ha acompañado al hombre durante siglos por la ayuda que le ha proporcionado en todos los campos. Aquí, sólo citamos algunas de las funciones que realiza este noble animal pero, sin duda, son infinitos los beneficios que aporta al ser humano. Es indiferente la función que realice, sea la de perro de trabajo o la de animal de compañía, lo importante es tener cerca uno para poder disfrutar de él y de su generosidad.