mfortini / Flickr
Como ya nos indica su nombre, el perro de pastor bergamasco proviene de los valles bergamascos de Lombardía, situado en la región de los Alpes italianos. Su origen es desconocido ya que esta raza es muy antigua, pero hoy día se encuentran por toda Europa y en algunos países de América.
Su característica más notable es el pelaje, largo y abundante formando así unos mechones muy característicos y naturales en esta raza. Se asemeja al pelaje de cabra, de aspecto suave largo y rizado para protegerle de las bajas temperaturas y las condiciones atmosféricas de su hábitat. El color del pelo siempre suele ser en tonos grises, marrones y negros; siempre oscuros y apagados.
Esta raza es de tamaño medio, con una cabeza de apariencia grande (más exagerada por el pelo) pero siempre en proporción con el cuerpo. Ojos grandes y de color marrón, poco visibles por la largura y abundancia del pelaje, y con una mirada dulce, cariñosa, apacible y siempre atenta. Las orejas son semi-caídas y de punta redondeada.
El pecho es amplio y profundo aunque el vientre es algo más retraído. La cola de este perro es fuerte, con una gruesa base pero estrechándose a medida que va hacia la punta.
Por su personalidad, el bergamasco es un perro que está siempre alerta de lo que sucede a su alrededor. Aunque duerma va a estar pendiente de todos los estímulos que le rodean, por eso se considera como un perro estable y excelente para desempeñar varias funciones como conducir y cuidar rebaños.
Los bergamasco son inteligentes, atentos y pacientes, no suelen mostrar agresión, pero al mismo tiempo son muy reservados con los extraños por lo que se puede decir que son buenos perros guardianes. En general se llevan bien con los humanos y niños, se socializan bien con otros perros y diferentes mascotas, aunque se debe adiestrarlos para ello desde cachorros.
Tienen una salud de hierro siempre y cuando le demos todos los cuidados necesarios para un perro, pero no se diferencia ninguna enfermedad canina característica de la raza. Lo más importante en el cuidado de los bergamasco es que necesitan mucho ejercicio para poder mantenerlos tranquilos y canalizar sus energías. Habitualmente viven en granjas en las que ayudan al pastoreo de las ovejas, y es preferible tenerlos en una casa con jardín ya que les gusta pasar tiempo en familia, pero tampoco estar constantemente en el interior de un lugar. Si viven en un apartamento es necesario que tengan al menos un paseo largo al día, acompañado de tiempo de juego.
mfortini / Flickr
Habitualmente miden entre 56 y 60 centímetros y pesan desde 26 a 38 kilogramos. La longevidad de esta raza se encuentra entre 13 y 15 años.
Hay que saber que para educar un pastor bergamasco se debe tener cuidados especiales porque puede llegar a ser un desafío. Aprenden muy rápido y son muy inteligentes, y por eso mismo fueron criados durante muchos años para tomar decisiones por sí mismos mientras desempeñaban su trabajo de pastores de ovejas. No es aconsejable que adquieran esta raza los dueños que quieren un perro muy obediente, ya que el bergamasco puede responder o no según lo importante que se crea.