Un chorrito de calma y relax
Es importante saber que el estado de ansiedad no es natural en los perros, que de forma consciente o inconsciente somos nosotros los que lo creamos en ocasiones. Esto se traduce en angustia o nerviosismo, exteriorizado en forma de actividad excesiva y obsesión hacia algo o alguien en concreto.
Este artículo tiene mucho que ver con el anterior. Debemos potenciar, reforzando sus momentos de relax, ese estado mental de estabilidad. Hay que hacerlo con energía baja y sin sobreexcitarle, rebajando el refuerzo positivo a su línea de su relax, con suavidad y casi susurros…manteniendo el nivel de calma.
Por ende, cuando veamos que nuestro perro está sobreexcitado, no debemos hacerle caso ni acariciarle (reforzar), a no ser que estemos jugando con el (y esto debería ser fuera de casa, juegos de energía alta).
En nuestro hogar debemos enseñarle que hay que estar relajado y tranquilo. Teniendo sus salidas de paseo, socialización y ejercicio diario le será muy fácil esperar saciado y tranquilo hasta la siguiente salida.
Tenemos que saber que las caricias y mimos son premios, reforzadores. De ahí que tengamos que tener cuidado a la hora de acariciar a nuestro perro, podemos potenciar un estado anímico equívoco sin querer.
Por ejemplo:
Si nuestro perro está ladrando a algún perro/persona/cosa no debemos intentar calmarlo acariciándolo, hay que redirigir esa conducta, cambiar su estado mental.
Si nuestro perro está en un momento de pánico o miedo ante algo o alguien no debemos acariciarlo para darle confianza, pues estaremos dándole a entender que nos gusta ese estado en el que se ha puesto.
Si nuestro perro está saltando sobre nosotros y se encuentra muy excitado no debemos darle más cariños ni seguir prestándole atención, pues le estamos haciendo entender que en ese estado consigue cosas de nosotros.
Los perros son unos detectives extraordinarios. Solo hay que observarlos, la forma que tienen de anticiparse, de saber qué es lo que va a pasar. Es algo increíble y esto es por su capacidad de observación y asociación. Llegan a aprender asociaciones muy complejas en las que el tiempo, el olor y el sonido unidos le dan el resultado final.
Por ejemplo:
Conocer el sonido del autobús que acaba de pasar, la hora a la que sueles llegar y el olor que en segundos va a captar hará que antes de que hayas bajado de éste ya te esté esperando en la puerta de casa.
Con esto quiero dar fuerza a la idea de que debemos darle un significado a su estado de calma premiando y felicitando. Causa- efecto. No así cuando esté alterado, no recibiendo nada a cambio.
La necesidad de sobre-excitación irá desapareciendo pues no le proporciona beneficios, en cambio la calma y estabilidad le dará frutos y tenderá a darse con más normalidad.
Ayudémosle a asociar lo que es beneficioso para el.
¿Alguna aportación adicional? Todo es bienvenido cuando hablamos de nuestros mejores amigos!
Fuente: este post proviene de ACEO, donde puedes consultar el contenido original.
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