Artículo de Lorena Mondoñedo, tomado de Diario Correo.pe
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Dar refugio a cuestas de una gran población de animales desamparados que deambulan por Lima es una tarea desinteresada de la que sacó partido Gloria Proleón, una mujer del Callao que transformó su casa en un recinto de cuidado para los perros y gatos que conmovieron su corazón denominado "Mi pequeño refugio".
De niña, Gloria vivía con sus padres en una espaciosa casa donde pudo criar hasta 20 perros en un corralón especial del lugar. Con el pasar del tiempo, cada perro abandonado o gato que se ocultaba del ruido de los carros y transeúntes era protegido por ella y llevado a su casa.
Una hazaña para proteger
Esta mujer reconoce que debe ingeniárselas para dar alimento a los 40 perros y gatos que ha ido adoptando de a pocos. Incluso cuando el dinero falta para comprar comida para animales, ella asegura que el alimento humano es la única solución. "A veces tengo que ir al mercado y conseguir productos para que ellos tengan que comer una sopa de verduras", comenta.
Actualmente Gloria Proleón vive con su esposo, hermano y su hija menor, quienes colaboran en brindar a esta gran cantidad de inquilinos para regalarles una mejor calidad de vida.
Claman por ayuda
Los cuatro hijos de esta amante de los animales han heredado el amor por proteger a estos seres. A diario buscan ayudar al albergue debido a la difícil situación de alimentar a todos los animales. Por ello tienen una cuenta en Facebook, una vía que ha servido para hacer un llamado a la población en favor de brindar la ayuda que ellos necesitan.
Esta es uno de los relatos reales que comprenden la promoción digital de Historias de Familias, un aplicativo que reveló Vencedor para dar a conocer diferentes casos sociales que despiertan el ejemplo de las buenas acciones a la sociedad. Cada una de estas cuenta con una canción, que puede ser descargada en este enlace.