Tomado de 20Minutos.es
Las investigaciones realizadas por la Guardia Civil han permitido sorprender al presunto autor de estos hechos, que carecía de documentación acreditativa de su legal procedencia. La actuación se produjo dentro de los servicios establecidos de forma permanente por la Guardia Civil de Valencia para evitar el comercio ilegal de animales que se encuentran en el catálogo de especies amenazadas.
Desde el pasado mes de agosto, los agentes investigaban la posibilidad de que en una nave del polígono industrial de Manises se almacenara "gran cantidad" de pieles de diversos animales recogidos en el catalogo CITES de especies amenazadas.
El equipo del Seprona de la Guardia Civil inició un operativo para localizar al presunto autor, que identificaron como un hombre de 57 años, de nacionalidad española, que almacenaba 8.300 pieles de diversos animales como serpientes, varanos y cocodrilos, sin documentación para acreditar su procedencia legal.
Técnicos especialistas pertenecientes a la Dirección Territorial de Comercio Exterior de Valencia confirmaron las sospechas de los agentes de que se trataba de especies protegidas y en peligro de extinción. El pasado 31 octubre se procedió a levantar acta denuncia por una infracción a la Ley de Contrabando.