Uno de los principales efectos secundarios del sobrepeso es que el perro pierde agilidad en los movimientos de su rutina cotidiana. Es decir, el perro se siente más pesado y por tanto, también se nota más cansado en los juegos de cada día. No es de extrañar que pueda surgir la consecuencia negativa de sufrir una cojera que limita la autonomía del animal. El perro también puede sufrir artritis. El sobrepeso también reduce la vida del perro, sin embargo, lo verdaderamente determinante no es tanto la cantidad de tiempo como la calidad del mismo.
La obesidad es el tipo de enfermedad más frecuente en los perros. Un buen modo de prevenir esta situación es que la mascota pueda realizar ejercicio físico de forma acorde a las necesidades de su edad. Por otra parte, en los menús caninos conviene reducir el consumo de golosinas así como de la cocina enlatada.
Algunos perros están sobrealimentados, es decir, comen más allá de su propia necesidad nutricional en relación con su estilo de vida. A veces, la obesidad también es una consecuencia lógica de la edad cuando el perro realiza menor actividad física como consecuencia del envejecimiento de los años.
Entre otras consecuencias negativas que puede tener el sobrepeso en el perro conviene recordar el riesgo de sufrir algún daño en el corazón, así como también afecta a la correcta respiración. Conviene puntualizar que algunos medicamentos caninos también pueden producir el efecto secundario de un mayor aumento de peso. Ante cualquier duda relacionada con la dieta del perro es recomendable que acudas al veterinario.
Los factores ambientales también contribuyen al sobrepeso del perro en la sociedad actual. Por ejemplo, aquellos perros que viven en un piso pequeño se mueven en un espacio reducido con pocas opciones de practicar ejercicio. En muchos casos, los paseos diarios también resultan muy cortos en relación a las verdaderas necesidades del perro. Si vives en una casa con una pequeña zona de jardín, tienes la ventaja añadida de poder convertir esta zona de exterior en un lugar de recreo y ocio para el perro.
Desde el punto de vista de la psicología canina, otros factores también pueden crear una predisposición hacia los kilos de más, por ejemplo, los periodos de estrés, o también, el aburrimiento que se deriva de los momentos habituales de soledad. A algunos perros les falta un estímulo externo de diversión. Esta es una de las razones por las que es una ventaja tener dos perros en casa, ya que cada uno siempre tiene con quién jugar.
Entre las posibles consecuencias gástricas del sobrepeso en los perros, conviene destacar dolencias como el estreñimiento. En algunos casos, la tendencia hacia el sobrepeso también puede tener un origen asociado a la genética de ese perro en concreto ya que cada caso es diferente.
También te interesará leer:
Cómo prevenir la obesidad en tu mascota