La relación entre el ser humano y el perro es casi tan antigua como nuestra historia; no por nada se le conoce como el “mejor amigo del hombre”.
Compañía, amor, diversión, fidelidad son algunos de los aspectos positivos que la presencia de un perro aporta a nuestras vidas. ¿Y qué decir cuando además de un perro, tenemos también uno o varios hijos?
Es delicioso ver como niños y perros se entienden, aman y acompañan a la perfección. Numerosos estudios han demostrado que la presencia de un perro de compañía es muy beneficiosa para la vida de los más pequeños.
Para comenzar aumenta sus capacidades sociales ya que el niño aprenderá a relacionarse de una manera natural y sencilla, fomentando además el desarrollo de habilidades como la empatía, ya que aprenderá a entender las necesidades y deseos de otro ser vivo.
En este sentido nos ayuda a responsabilizarlos y hacerlos más cooperativos, aprendiendo a desempeñar con constancia y compromiso algunas actividades sencillas como dar de comer al perro, sacarlo a pasear o ayudar a bañarlo y limpiar su espacio.
Desde un punto de vista físico, la convivencia con un perro disminuye los niveles de estrés y las probabilidades de padecer alergias o asma en los niños, así como incentiva la práctica de actividades físicas a través del juego. Será mucho más fácil convencer a los pequeños de abandonar la televisión o los videojuegos si les proponemos jugar o pasear con el perro.
Psicológicamente hablando, el compartir espacios con un perro ayudará a mejora la autoestima de los niños y a perder el miedo a estos animales. Personalmente recuerdo que, antes de tener un perro en casa, mi hijo tenía gran temor del entrar en contacto con estos animales. En alguna ocasión, caminábamos por la calle y salió corriendo con solo escuchar los ladridos de un perro al otro lado de una reja. Ahora en cambio juega con los perros de la casa con una confianza e intimidad sorprendente y ya no tiene temor de otros perros.
Los perros son fuente constante de cariño y juego en todas las etapas de la vida de nuestros pequeños. Notarás que la presencia de un perro en casa con tus hijos hará aumentar el número de fotos en los álbumes ya que querrás sin duda conservar con una imagen cada momento tierno o divertido que compartan.
Si aún no te has convencido, disfruta de la siguiente galería de fotos de niños y perros en diferentes etapas y llénate de amor, diversión y ternura.
Y tú, ¿ya te decidiste a incluir un perro en la vida de tu familia? Compárteme tus fotos más lindas de perros y niños y, ¡te espero en el próximo post!