Existen algunos falsos mitos sobre la esterilización de mascotas y es fruto de la falta de información que hay a nuestro alrededor. Hoy os contamos algunos de ellos y lo que en realidad sucede.
- “Si esterilizo a mi mascota no voy a dejar que cumpla su ciclo de vida”: Las mascotas se reproducen por instinto y éste obedece a una serie de cambios hormonales durante la época de celo. No hay una relación consciente que pueda traer un bienestar emocional al animal, por ello, las ideas acerca de posibles traumas por la esterilización de mascotas son erróneas.
- “Si no dejo que tengan, al menos una camada pueden aparecer tumores”: Está comprobado científicamente que la esterilización a edades tempranas (a partir de los 4 meses de edad), antes de que aparezca el primer celo, reduce enormemente la aparición de tumores en la etapa adulta, esto porque cuanto más estimulo hormonal haya, mayor será el riesgo de que estas patologías puedan aparecer.
- “Mis mascotas pueden engordar”: Es cierto que después de la esterilización disminuye el metabolismo del animal y algunos tienen tendencia a ganar peso; sin embargo, esto es muy sencillo de controlar con una buena alimentación y un poco de ejercicio. En el mercado hay alimentos disponibles para cada etapa y condición, su veterinario le orientará acerca del más conveniente según el caso. Las mascotas dependen, en gran medida, de los hábitos que cada propietario tenga, si se fomenta el sedentarismo y no hay control en la alimentación, habrá una tendencia al sobrepeso, incluso en animales no esterilizados.
- “Se puede modificar la conducta de mi mascota”: Se pueden dar cambios de conducta en el animal, como disminución de marcaje, disminución de vagabundeo y pueden mejorar problemas de agresividad. Sin embargo, estas modificaciones con la esterilización de mascotas son deseables y no se relacionan con su capacidad de guardia y protección.
- “Me da miedo someter a mi mascota a los riesgos de la cirugía”: Como en todos los procedimientos quirúrgicos existe la preocupación de la anestesia, sin embargo, esterilizar a un animal requiere de 20 a 45 minutos, por lo que el tiempo que su mascota permanece dormida es mínimo, además, en los animales jóvenes en buenas condiciones de salud los riesgos disminuyen enormemente. Tu médico te orientará de los cuidados pre y post operatorio para prevenir cualquier situación. Es importante mencionar que existen algunos padecimientos que requieren esta misma cirugía como urgente (Piometría), y las condiciones en las que su mascota pudiera encontrarse en ese momento si podría implicar riesgos importantes.
Imágenes/Flickr: brianac37, Tripp, Bowi The Boxer.