Si tu perro ha resultado un buen alumno y ya domina por completo el adiestramiento básico, quizás desees introducirlo en nuevas habilidades sobre la educación de perros para pasar ratos agradables que, en este caso, no serán obligatorios como son los de obediencia básica, pero sí muy amenos.
Una de las habilidades es hacer que el perro se siente sobre las patas y ladre. Este ejercicio es uno de los principales en la educación de perros, este se aconseja para variedades pequeñas o medianas que posean la disposición adecuada. A los ejemplares de talla grande les resulta incómodo mantener el equilibrio en esa posición. Los canes recios y de patas cortas, como el Yorkshire Terrier o el Bichón Maltés, la practican con mucha facilidad y apenas necesitan aprendizaje.
Mantener el equilibrio
Para enseñar este ejercicio, el perro debería tener al menos seis meses. Empezaremos sosteniendo un premio a la altura de la cabeza del perro, próximo a su alcance y mostrándoselo. Le diremos con voz agradable Pide, Arriba, Firme. Esperaremos hasta que el can levante suavemente la parte delantera de su cuerpo encontrando el punto de equilibrio. Repetiremos la orden y, al mismo tiempo, recompensaremos con el estímulo.
Hay que repetir el procedimiento animando al perro a mantener el equilibrio por sí solo. Tendremos que tomarnos algo de tiempo y paciencia para realizar este ejercicio, de lo contrario tu mascota podría balancearse y apoyar rápidamente una pata para asegurarse ante la primera señal de pérdida de equilibrio. Si se balancea mucho, prueba a practicar el ejercicio en un rincón, donde las paredes le sirvan de soporte y le den seguridad.
Generalmente los cachorros aprenden y ejecutan este ejercicio con gran celeridad. Hay que premiarlo únicamente cuando seas tú el que le ha ordenado ejecutar el ejercicio, evitando hacerlo cuando adopte la postura de forma espontánea, fuera de contexto y para obtener la golosina.
Hazte el muerto
Otra habilidad nueva que le podemos enseñar sería el ejercicio de "hacerse el muerto". Para realizar este ejercicio, el animal deberá conocer primero la orden de tumbado. El paso siguiente sería enseñarle a hacerlo de costado. Una vez tengamos tumbado el perro, bajo la voz de Muerto, le empujaremos suavemente hasta colocarlo en la posición en la que el animal estará en el suelo tumbado de lado. Lo mantendremos así presionándole con la mano, lo practicaremos varias veces y en unas cuantas sesiones, asociará la orden con esa posición. Es importante recordar que siempre hay que elogiar y premiar a nuestra mascota cuando ejecute correctamente una orden.
A medida que vaya creciendo, quizás notemos en él pequeños hábitos que pueden desarrollarse y convertirse en habilidades peculiares de manera natural. Por ejemplo, algunos perros arrojan objetos o incluso los recogen y nos los traen para que se los lancemos y juguemos con ellos. Otros aprenden a abrir puertas, a levantar una alfombra y a esconder cosas debajo, etc. Estas conductas son variantes de comportamientos caninos normales y pueden fomentarse mediante el estímulo y la recompensa.
Dame la patita
Para enseñarle a dar la pata cuando se lo ordenes, debes sentarte o arrodillarte y hacer que él se siente frente a ti. Indícale la orden Dame la pata o Dame la patita y tómala con tu mano elogiándolo claramente. Repite el procedimiento con la otra pata y así sucesivamente hasta que se fije la respuesta que buscamos.
Que el perro ladre cuando se le ordena, puede ser útil además de divertido. Empezaremos dándole la orden Ladra cada vez que él ladre voluntariamente. Cuando tu animal de compañía asocie la palabra con la acción de ladrar, prémialo y dile Ladra. En varias sesiones en las que asocie la orden con su premio, lo habremos conseguido.
Trae la pelota
Correr tras una pelota y llevarla en la boca forma parte del instinto cazador del perro, por lo que nos será muy fácil enseñárselo. Le colocaremos una correa larga, le haremos sentar a nuestro lado y, mostrándole la pelota o el objeto que queremos que nos traiga, lo lanzaremos a la vez que le daremos la orden de Trae. Al principio lanzaremos el objeto a una distancia corta y, una vez que el perro atrape el objeto, tiraremos de la correa hacia nosotros mientras le decimos Aquí. Cuando lo tengamos delante, con el objeto en la boca, forcejearemos con él, pero nunca se lo quitaremos de la boca hasta que él entienda el juego y nos lo entregue.
Progresivamente, iremos aumentando la distancia de tirada del objeto y, como habremos practicado la llamada con la orden de Aquí, ya no será necesario tenerle puesta la correa; lo practicaremos sin ella. En un principio, la cuerda nos asegura que el can no se irá corriendo con el objeto y nos dejará solos. Con ella, nos aseguramos de que la orden que le vamos a dar la ejecutará correctamente porque no podrá escapar.
En este ejercicio practicaremos la llamada y a la vez aprenderá a traernos la pelota o cualquier otro juguete que lancemos. En este sentido, hay que señalar que a muchos perros les gusta traer objetos en la boca y se trata de una cooperación que no debe desperdiciarse, aunque el periódico nos llegue algo desbaratado.
Fotografías / Flickr (por orden de aparición): silversx80 / Petteri Sulonen / LisaAuch/ Che89