El baño es un hábito de higiene que debemos tener con nuestros animales cuando convivimos con ellos. No sólo por el hecho de evitar olores y suciedad en la casa, sino porque de esta manera, controlaremos determinadas enfermedades en su piel causadas por bacterias u otros agentes externos.
Cierto es, que muchos disfrutan nadando en un lago, piscina o incluso la playa…pero, ¿Por qué no les gusta entonces que los bañemos?
El perro reacciona de forma temerosa ante esta actividad por varios motivos: Se sienten amenazados, inmovilizados, les quitamos su propio olor corporal, el secador desprende un ruido estruendoso y muchas veces, no utilizamos la temperatura del agua adecuada.
¿Cuál es la temperatura óptima del agua para el baño?
Para garantizar el bienestar del animal, la temperatura del agua debe ser un grado o dos superior a su temperatura corporal. Si la temperatura del perro, oscila entre los 38.5º y 39.2º, la del agua debe estar alrededor de los 40º. Es decir, debe estar tibia. De esta manera, evitaremos quemaduras en su piel.
¿Pensáis que el animal pasa frío con el agua tibia?
En ocasiones, habréis podido observar, como el animal tirita durante el baño. Ésto, os lleva a pensar que siente frío y tendéis a subir la temperatura del agua.
El animal puede tiritar por dos motivos; Por un lado, porque tenga miedo y ésto le provoca esos temblores, o porque la temperatura del ambiente sea muy baja. Por tanto, lo que recomiendo es acondicionar primero la habitación donde se va a bañar, poniéndola a la misma temperatura que el agua o un poco inferior. Es decir, entre 35º y 40º.
Aprovecho la ocasión, para recomendaros la lectura del siguiente artículo si tenéis problemas para cepillar a vuestro perro:
¿Cepillar el pelo a tu perro es una torura para ambos? Averigua cómo solucionarlo.
Espero que estos consejos hayan aclarado vuestras dudas al respecto, y recordad, que podéis contactar conmigo dejándonos un comentario.
Feliz día, perrer@s!
María Morales Martínez
Educadora y Terapeuta Canino.
.