A pesar de ser un felino en ocasiones salvaje los gatos son fáciles de disciplinar si se les trata desde el inicio con amor y respeto. Para nadie es un secreto que los gatos saltan con frecuencia sobre los mostradores, mastican cables y arañan artículos del hogar que no están diseñados para ser arañados un ejemplo de ello son los muebles y cortinas.
A menudo es posible disciplinar a un gato para que no tenga este tipo de comportamientos y una de las técnicas más conocidas y efectiva es aplaudiendo, levantando la voz o usando un rociador de aire.
Cabe destacar que a muchos gatos les encantan las golosinas crujientes, especialmente las que tienen sabor a pollo o pescado. Y, por supuesto, una sesión de caricias puede inspirar a tu gato a comportarse bien en casa.
Aprende cómo disciplinar a tu gato en pocos días Ahora bien, si las malas conductas fueron causadas por un deseo de más atención disciplinar a tu gato personalmente no es una buena idea, pues lo más probable es que luego te tenga miedo y además podrá repetir el comportamiento cuando no estés presente. Sin embargo, hay algunas formas de prevenir el comportamiento incluso si no estás cerca.Entre ellas destacamos:
Cinta adhesiva de doble cara o papel de aluminio: estas cosas simples se pueden colocar en superficies que no desean que su gato destruya y como dato curioso te comentamos que a los gatos no les gustan las texturas.
Asegúrese siempre de proporcionar alternativas positivas, como un rascador cercano o un mueble para gatos que le permita a su gato un lugar para trepar y posarse.
Use rociadores de aire activados por movimiento: coloque estos dispositivos alrededor de las áreas a las que no desea que acceda su gato. Si el gato se acerca, rocie de forma inmediata, al aire.
Di algo: asusta a tu gato con un fuerte ay u otra palabra para terminar con cualquier comportamiento brusco. Esto es efectivo para gatos que son agresivos con las personas y puede morder o agarrar su brazo o pierna. Luego, aléjate inmediatamente del gato. Entra en una habitación y cierra la puerta.
Como consejos te comentamos que no es recomendable responder con fuerza a un gato que muestra agresión, pues su rabia aumentará y con ello la agresión en el gato, lo que traerá como consecuencia un comportamiento negativo.