Una técnica (la que usa nuestra doctora) es envolver al gato con una franela para que se quede quieto (una vez el gato saltó de su transportadora como chapulín y ella lo atrapó en el aire con la franela). Pues bien, acabo de encontrar otra que ya lleva sus buenos años pero no la conocía y quiero compartirla con ustedes. Se trata de la "clipnosis", que consiste en colocarle un clip grande de oficina en el cuello del gato para que se relaje.
¿Por qué el gato se tranquiliza? Porque los gatos recuerdan la forma en que eran transportados por su madre, los agarraba del cuello con su boca sin hacerles daño y ellos se quedaban quietos. Al imitar a la madre con el clip reaccionarán como si fueran transportados por ella y se quedarán inmóviles.
Sabiendo utilizar ésta técnica no se lastima al gato, por eso no intentes hacerlo tú, deja que un veterinario experimentado lo haga.