Enviado por Ecoticias.com
Unas labores de mantenimiento realizadas por la Comunidad de Madrid a principios del mes de enero en la carretera M-501 a su paso por el río Guadarrama, han provocado la destrucción de una colonia de topillo de Cabrera, provocando la muerte de sus individuos, en una zona catalogada como de "máxima protección" dentro del Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama y su entorno e integrante de la Red Natura 2000 bajo la denominación de Zona de Especial Conservación (ZEC) "Cuenca del río Guadarrama". Esta actuación, a pesar de que contaba con los correspondientes permisos del Parque Regional, ha provocado un grave e irreparable daño a la biodiversidad, por lo que ha sido convenientemente denunciada ante los Agentes Forestales. Así mismo, se solicita a los órganos de gestión correspondientes, entre ellos al Parque Regional, que sucesos similares tan fácilmente evitables, pero que ocasionan tan graves impactos irreparables a la biodiversidad, no vuelvan a repetirse.
El topillo de Cabrera (Microtus cabrerae), reclasificado recientemente por los expertos como iberón (Iberomys cabrerae), figura entre los valores de la Zona de Especial Conservación (ZEC) "Cuenca del río Guadarrama" según recoge el plan de gestión aprobado por el Decreto 105/2014 de la Comunidad de Madrid. Se trata de una importante especie amenazada, endémica de la Península Ibérica. Presenta un área de presencia escasa y fragmentada, muy reducida a nivel local, debido a sus estrictos requerimientos ecológicos y a la destrucción de su hábitat por actividades humanas. Está especializado en hábitats de la región mediterránea cercanos a zonas húmedas y de vegetación que se mantenga verde todo el año, principalmente en las riberas de ríos, arroyos, junqueras, gramíneas perennes, carrizales o comunidades vegetales nitrófilas. Se alimenta principalmente de hojas, tallos y semillas de diversas especies de gramíneas, así como de juncos, y vive en pequeñas colonias. Su reducido hábitat, cada vez más escaso por la destrucción directa y la falta de agua, hace que esta especie esté amenazada y en declive. Por esta razón, está catalogado como Vulnerable en el Catálogo Regional de Especies Amenazadas de Madrid. A nivel nacional está incluido en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, y en el Anexo II de la Ley 42/2007, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad. Así mismo, en la Lista Roja Española está catalogado como Vulnerable. A nivel Comunitario, está protegido por los Anexos II y IV de la Directiva 92/43/CEE, relativa a la conservación de los hábitats naturales y de la fauna y flora silvestres.
Por todo ello, el topillo de Cabrera es una de las especies prioritarias que el Parque Regional, tiene la obligación de conservar. Sin embargo, el Parque Regional no ha respondido a esa obligatoriedad para la que ha sido creado, y ha autorizado unas actuaciones que han ocasionado la destrucción completa de una de las escasas colonias que hay en el Parque de esta especie, sin que estas actuaciones fueran evaluadas previamente antes de la concesión del permiso otorgado, ni tampoco vigiladas, a pesar de que se iban a desarrollar en una zona catalogada como "de máxima protección".
Las labores realizadas en la zona afectada han consistido en la corta de vegetación arbórea y el desbroce de la vegetación arbustiva, empleándose maquinaria pesada para la realización de estas tareas. Estas tareas provocaron un fuerte aplastamiento y alteración del suelo en el lugar donde se encontraba la colonia del topillo de Cabrera. Sin embargo, si la gestión del Parque Regional hubiera sido la apropiada y el permiso concedido hubiera sido condicionado por la incorporación de unas sencillas medidas y de la vigilancia necesaria, la actuación podría haberse realizado sin provocar ninguna afección y sin impedimento alguno, pudiendo haberse realizado los trabajos de forma predominantemente más manual, con el fin de evitar la grave afección y alteración del suelo donde se encontraba la colonia, acción perfectamente viable dada la pequeña superficie trabajada y la escasa vegetación afectada.
Por ello, no se entiende desde Ecologistas en Acción que, medidas tan importantes, sencillas, efectivas y económicas, no se hayan realizado. Por ello los ecologistas denuncian la dejación de funciones realizada por el Parque Regional y se preguntan en qué consiste en realidad su gestión y funcionamiento y a qué se dedican sus fondos si no muestra ningún interés en la conservación real de su biodiversidad, que es para lo que ha sido creado.