Los animales son atendidos con dedicación por los empleados y eso puede observarse a simple vista. (Roberto Salvadores / Los Andes)
El Gobierno de Costa Rica ordenó el cierre de todos los zoológicos y la liberación de los animales en cautiverio, como parte de un proyecto político y social para promover el respeto al medio ambiente.
"Nos estamos deshaciendo de las jaulas y reforzando la idea de interactuar con la biodiversidad en parques botánicos de manera natural", explicó el ministro de Medio Ambiente, René Castro.
Costa Rica, uno de los países más ricos en cuanto a flora y fauna, tiene dos zoológicos estatales: el Parque Zoológico Simón Bolívar, en pleno centro de la capital, y el Centro de Conservación, en el suburbio de Santa Ana.
El Simón Bolívar, uno de los zoológicos más emblemáticos de la ciudad, será transformado en un jardín botánico y en un parque natural urbano. Con la reforma se pretende eliminar las jaulas y los 400 animales serán reubicados en centros de rescate y zoológicos privados del país para que puedan crecer libremente. Los animales exóticos o en peligro de extinción serán trasladados a los hábitats naturales a los que pertenecen o a reservas naturales donde recibirán cuidados especiales.
La noticia no fue bien recibida por parte de Fundazoo, la organización que tiene un contrato hasta 2024 para trabajar en los Parques, por lo cual va a apelar en tribunales para el bloqueo del cierre del zoo.
En Argentina, las recientes muertes de un león africano y otros animales en el zoológico de Mendoza y los reclamos por las condiciones en la que vive el oso polar Arturo reavivaron la polémica sobre las condiciones de vida en estos paseos.