Se trata de un insecto que se ha diversificado en una inmensa cantidad de especies, que comparten muchas características, aunque tienen diferencias respecto a los espacios que habitan, así como el tipo de sustancias de las que obtienen sus nutrientes.
La capacidad de establecerse en diferentes lugares se debe a diversos factores. Entre ellos la capacidad de las larvas para alejarse del peligro, la multitud huevos que es capaz de poner cada hembra, un sistema digestivo que le permite procesar diferentes sustancias incluso en descomposición, así como excrementos de otros animales. Esto hace que esté muy relacionado con la vida de otras especies.
Una de estas especies está muy relacionada con la vida humana. Se trata de la mosca común, cuyo nombre científico es Musca domestica. Se especializa en nutrirse tanto de los alimentos en descomposición, las heces y la carne. Ha logrado adaptarse a todos los climas, incluso en el invierno logran sobrellevarlo, al estar en una de sus etapas previas al desarrollo del adulto formado por completo.
Diferentes investigaciones han localizado también este tipo de mosca en su etapa adulta en la época invernal. Lo que hacen es esconderse ya sea en estructuras o incluso en bolsas de basura donde se mantiene una temperatura más alta que la del ambiente. De hecho, se han localizado grandes cantidades de larvas en este tipo de espacio, lo que significa que no se inhiben en estas condiciones de aparearse y procrear.
También se pueden conseguir moscas en lugares tan desafiantes como los desiertos o las sabanas africanas. Al igual que se pueden observar desde las zonas tropicales hasta las regiones polares. Lo que confirma su capacidad de colonizar diferentes ambientes naturales.
En cuanto a los elementos que las atraen resaltan los sitios donde se acumula basura, materia orgánica en descomposición, desechos animales y también vegetales. También se agrupan alrededor de sitios con animales y donde hay excrementos. Así mismo hay especies que parasitan animales vivos en los que colocan larvas. Estos insectos también se instalan cerca de cuerpos de agua como charcos, lagunas, ríos, sin distinción si son aguas limpias o contaminadas por acción humana.
La Drosophilidae es el nombre del género que abarca unas 3000 especies. Entre ellas está la famosa mosca de la fruta. Es muy conocida por colonizar las frutas en fermentación. Allí consigue alimento, refugio y también deposita sus huevos para que se desarrollen y en el proceso se van alimentando. En este grupo también están incluidas las llamadas moscas del vinagre, estas buscan su sustento en frutas y vegetales que ya están muy maduras o empiezan a dañarse. También se asientan en sustancias liquidas ácidas o en descomposición. Es usual conseguir esta especie en el fondo de recipientes que contienen cerveza.
Duración de vida de una mosca
Para considerar la expectativa de vida de una mosca hay que tomar en cuenta que no se trata de una sola especie. Estos insectos se han diversificado evolutivamente en muchos grupos y se tienen identificadas unas 160.000 especies. Ese número no representa a todas las existentes ya que se cree que el número puede superar el millón.Con tal cantidad de diversidad no todas siguen el mismo patrón, por lo que, como es natural unas tienen un ciclo vital más prolongado que otras. Ahora bien, se puede decir que hay un rango en el que buena parte de las especies están en un rango de los 15 a los 31 días de vida. Este lapso está referido a la vida natural de las moscas, pero en las condiciones de laboratorio se ha logrado prolongar su vida hasta los 60 días. Las condiciones climáticas, depredadores, entre otras variantes influyen en que puedan vivir más o menos tiempo, tal como ocurre, en general, con todas las formas de vida.
Hay que tomar en cuenta que la mosca atraviesa diferentes cambios antes de llegar a convertirse en un adulto desarrollado y funcional. Estos cambios son huevo, larva, pupa y finalmente adulto. Estas fases tienen sus variaciones de tiempo, no solo a causa de las características de cada especie en particular, sino también porque las condiciones de desarrollo en cada fase también influyen.
Algunas especies, como la mosca del establo, pueden pasar en estado de pupa hasta 20 días, dependiendo de un factor como el clima. Luego, al convertirse en adulto puede vivir alrededor de unos 20 días.
Las moscas azules, también llamadas moscardas de la carne, necesitan un tiempo de 15 días para llegar a la etapa adulta. Al salir de la cápsula puparia pueden vivir entre unos 10 más aproximadamente.
La especie Phormia regina, también conocida como mosca negra, se desarrolla en carne en descomposición, ya sea muerta, o de animales que tienen alguna herida abierta. Su rango de vida se extiende entre los 10 y los 23 días.
En el caso de la mosca común, su rango de vida suele estar alrededor de los 21 días, en caso de que haya condiciones adversas, de lo contrario puede vivir unos 30 días.
La mosca de la fruta tiene un tiempo de vida de alrededor de 20 días, aunque en algunas condiciones de temperatura adecuada puede llegar a los 30 días.
Una especie diseminada en varios continentes es la mosca mediterránea. Suele asentarse en distintos tipos de fruta, donde deposita sus huevos. Es una especie muy particular con la zona del tórax en color negro y amarillo. Mientras el abdomen presenta tonos naranjas con 2 franjas plomizas. Su desarrollo toma entre los 6 a 11 días, momento en el que se convierte en adulto, aunque todavía no está en capacidad de reproducirse. La madurez sexual la adquirirá poco después al alimentarse adecuadamente. Su ciclo vital oscila alrededor de los 30 días.
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