El simple hecho de ser una isla ya obliga a que el viaje sea en barco o en avión. Si quieres viajar en avión puedes hacerlo prácticamente desde cualquier punto de España, eso sí, sabiendo que perros de menos de 8 kilos pueden viajar en cabina y los que superen estos kilos solo en bodega. También hay que recordar que no es recomendable el viaje en avión para razas de perros braquicéfalas (hocico chato).
Si quieres viajar en barco, los dos puertos principales desde la península son Barcelona y Denia en dirección al puerto de Ibiza. Independientemente del tamaño y la raza del perro, el barco viene preparado con una zona Dog Friendly, donde en un contenedor viajan cómodamente los perros con aire acondicionado y con posibilidad de estirar las patas en cubierta.
Ahora bien, para venir a Ibiza con perro el verano es una de las peores épocas, tanto por el calor como por la cantidad de gente. La mejor época es en abril o mayo o en septiembre u octubre, cuando aún hay numerosos alojamientos pet-friendly abiertos y el clima no es tan agobiante.
Para alojarte el pueblo más bonito es Santa Eulalia del Río. Un pueblo de turismo familiar, tranquilo y muy pet-friendly. No solo tiene playas para perros sino que también cuenta con un parque canino y numerosos establecimientos para él. Peluquería, centros veterinarios, tiendas para mascotas, etc.
En estos meses aún encontrarás numerosos establecimientos donde poder ir acompañado de tu perro, ya que la mayoría de terrazas y restaurantes permiten que puedas disfrutar de una comida, cena o helado acompañado de tu perro, ¿nuestras recomendaciones?
Para comer te recomiendo el Thai llamado “El Rincón del Río” donde podrás degustar no solo comida Thai, sino otro tipo de platos. Bueno, bonito y barato y con una fresca que corre en su terraza que se agradece mucho en verano. En la playa Talamanca, en Ibiza, también podrás comer una buena paella en algunas de sus terrazas donde muchas permiten acudir con perro.
Para cenar te recomiendo cualquier terraza de los muchos restaurantes que encontrarás en el pintoresco pueblo de Santa Gertrudis. En la mayoría de terrazas podrás estar acompañado de tu perro.
Para tomar un helado artesanal, un crepe o incluso cenar una focaccia nada mejor que la Heladería LAlchimista, situada en el Paseo marítimo de Santa Eulalia.
En cuanto a la playa, olvídate de acudir a cualquier playa pública con tu perro. Para ello, nada mejor que apostar por calitas recónditas donde no puedas molestar a nadie. Aún así, hay tres playas exclusivas para perros.
Dos se encuentran en el pueblo de Santa Eulària. Ambas son playas que en su exterior son de cantos rodados y en su interior son de suelo rocoso, por lo que más que nunca se aconseja nadar y no andar sobre el suelo (a no ser que lleves chanclas lo cuál es muy recomendable). Si eres de los que no te importa un suelo rocoso, la playa de Es Faralló te va a encantar. La otra se llama Sa Punta des Nedadors y se encuentra en la desembocadura del río
La tercera, mucha más agradable se encuentra en Ibiza, concretamente en la playa de Figueretas. En un tramo de esta playa se ha limitado una zona para que humanos y perros puedan disfrutar conjuntamente de un día de playa. Eso sí, tu perro debe ir atado siempre que esté en el exterior de la playa porque si sobrepasa el límite de la playa acotada te puede caer una multa. Aún así, vale la pena porque la playa es de arena.
Aparte de ir acompañado de tu perro en los momentos de playa y de comer, te aconsejamos paseos que no te puedes perder:
Dalt Vila: un paseo por la ciudad amurallada de Ibiza te va a encantar. Un paseo muy agradable para perderte entre sus callejuelas y admirar las maravillosas vistas de la ciudad y del mar desde lo alto de la catedral. Te hincharás a hacer fotos.
Paseo Marítimo de Santa Eulalia: Santa Eulalia es uno de los pueblos más bonitos de la isla y un paseo con tu perro por su paseo a partir de las siete de la tarde se vuelve maravilloso. Puedes empezar por donde quieras, eso sí, sigue el paseo mirando al mar siempre hacia la derecha así podrás recorrerlo hasta llegar al paseo del río, seguir andando hasta el puente romano, cruzarlo hasta llegar el Museo Can Planetas, seguir por un sendero hacia el Puig de Missa donde admirar una panorámica preciosa, bajar hacia el pueblo de nuevo y retomar el paseo marítimo. No tiene pérdida y te va a encantar.
Paseo playero por la playa de Talamanca: aunque no se admiten perros en la playa, sí permiten que puedas pasear con tu perro por el camino de madera que recorre la playa de punta a punta. Un precioso paseo que puedes hacer de buena mañana cuando aún no aprieta el calor y desayunar en una de sus innumerables terrazas con vistas al mar.
Paseo de San Antonio: el paseo marítimo de San Antonio no es muy bonito pero tiene la mejor puesta de sol de todas. Son míticas las puestas de sol, por eso te recomiendo que aproveches un atardecer para ir con tu perro, recorras su paseo y aproveches para fotografia una puesta de sol inolvidable.
En verano hace muchísimo calor, pero si se te ocurre venir en abril o en octubre puedes sumar a los planes con tu perro la práctica de senderismo. Hay innumerables rutas para hacer, las de costa las más recomendadas: la ruta circular de Portinatx, la bajada a Sa Pedrera (que los hippies rebautizaron como Atlantis), la ruta circular de Cala Llonga, la ruta circular que une Cala Bassa con Cala Comte.
En fin, como ves hay numerosos planes y facilidades para que puedas venir de vacaciones a Ibiza.
La normativa no es diferente al del resto de España: llevar al perro atado siempre dentro de ciudad, recoger todos sus desperdicios, respetar las prohibiciones, preguntar siempre en las terrazas si puedes entrar con perro, etc.
¡Bienvenidos a Ibiza!
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