Para empezar hay que dejar claro un aspecto: la edad no es una enfermedad los perros de cierta edad pueden y deben hacer actividad física, eso sí adaptadas a sus características.
Estas características van desde la edad, (por supuesto no es lo mismo un cachorro que un perro de 16 años), la raza o el sexo, a aspectos modificables como la condición física, el humor del perro, las patologías traumatológicas, reumatológicas o neurológicas, su condición de salud general (aspectos relacionados con la medicina interna)...
Los perros deben hacer actividad física toda la vida, los cachorros deben correr, saltar, jugar con otros perros, subir cuestas, saltar márgenes, los perros de edad adulta a partir de los 2 años pueden practicar deportes caninos o bien acompañar a su dueño en los paseos en bicicleta, por la montaña, hacer trecking o correr con su propietario...
En los perros de razas grandes: pastores alemanes, golden, labrador a partir de los 9-10 años debemos empezar a controlar su actividad física pero en ningún caso suprimirla.
Si tenemos un buen control veterinario es bueno hacer alguna radiografía de control si observamos leves cojeras o bien cansancio prematuro. A veces los perros se detienen en sus marchas o carreras por problemas articulares, o por jugar, para observar algo que les inquieta o les llama la atención y podemos confundirlo con cansancio atribuyendo equivocadamente la renuncia al paseo largo a fatiga física y no a dolor articular.
Existen en el mercado numerosas ayudas técnicas y ortesis, de codo, de rodilla, de cadera, de carpo, de tarso que podemos utilizar en perros mayores para mejorar su estado articular y permitirles continuar con su actividad física de forma confortable.
Es recomendable pues, si observamos un "bajón" en el rendimiento deportivo del perro o en su actividad física acudir al veterinario y no asociarlo directamente a la edad puesto que se pueden hacer muchas cosas para mejorar este estado articular y adaptar la actividad física lo que va a contribuir a la mejora de su estado de salud general y su estado anímico en particular.
Antoni Ramon Boixaderas
Fisioterapeuta de Animales
profesor de fisioterapia veterinaria de la Universitat de Girona