Ah, que no, que a lo mejor has llegado hasta aquí porque el tipo de gruñido que hace tu perro no te gusta, o te da miedo, o incluso porque no te gusta lo que otras personas puedan pensar de él…
Bueno, entonces vamos a empezar por el principio: ¿te has fijado cómo es el gruñido de tu perro? ¿Has notado alguna diferencia alguna vez entre un gruñido y otro? Si la respuesta es que sí, ¡maravilloso! ya tenemos un paso importante dado. Si es que no, no te preocupes, presta atención y verás como poco a poco puedes ir notando algunas diferencias.
Ya he contado anteriormente algunas cosas de la comunicación no verbal de los perros en uno de mis artículos para Mascotea, y allí hablaba un poco de los gruñidos de los perros. Pero esta vez vamos a centrarnos más en cada tipo de gruñido, y en el por qué lo hacen.
Comunicación canina
Lo primero y fundamental es saber que los perros se comunican con gruñidos, además de con otras vocalizaciones y gran cantidad de gestos. Así que, en cualquier caso, que tu perro gruña es una señal inequívoca de que se está comunicando contigo o con otro individuo de su misma especie o de otra. Y esto es estupendo porque como puedes imaginar, tener un perro que no se comunique hace que el entendimiento sea mucho más difícil. Así que, la próxima vez que tu perro gruña, ¡congratúlate! El siguiente paso es poder entender el motivo de esa comunicación y qué quiere decirnos. Por eso castigar, regañar o tratar de inhibir un gruñido, lo único que puede traer es falta de comunicación con la eliminación de señales que nos llevarán a comportamientos más exagerados que un gruñido, como un mordisco o que el perro salga huyendo, por ejemplo.
Gruñido de juego
Es verdad que a veces el juego más o menos prolongado puede desencadenar algún tipo de “roce” o pelea entre los perros que están jugando, principalmente cuando la testosterona va subiendo y no saben autorregularse o regularse el uno al otro, pero eso nada tiene que ver con este tipo de gruñido, corto y más agudo, que utilizan en sus juegos o cuando juegan contigo. También pueden emitir este gruñido cuando están esperando a jugar e incluso increpándote para que te animes o se anime alguno de sus camaradas.
Gruñido de advertencia
El gruñido de advertencia tiene un claro proprósito: hacer que el estímulo que le provoca miedo o molestia desaparezca. Si una persona entra en la casa y el perro gruñe advirtiéndole que se marche, es eso precisamente lo que persigue. La señal es clara y el perro podrá morder si es necesario para conseguir su fin. Este gruñido es muy característico, y va acompañado de boca cerrada, pupilas dilatadas, y un lenguaje corporal rígido y sin respiración. Puede tener bajo volumen, lo que a lo mejor despista al receptor del mensaje.
Es común también ver estos tipos de gruñidos en perros que pueden estar sufriendo algún tipo de dolor, y al acercarnos a cogerlos o acariciarlos, comiencen a pedirnos con este gruñido que nos apartemos de él. También las hembras preñadas o cuando algún perro, macho o hembra, protege sus juguetes o la comida.
Este gruñido requiere de ayuda profesional para evitar que escale a niveles de agresividad y para encauzar la situación evitando males mayores.
Gruñido de frustación
Muchas veces puede ir acompañado de algún ladrido, generalmente corto y repetido una o dos veces. Podemos escucharlo después de jugar, casi protestando por haber terminado el juego, en un entrenamiento donde no está entendiendo lo que le pides o si le estás pidiendo demasiado antes de reforzarle, por ejemplo. Es un gruñido muy agudo que también se puede combinar con algún gemido, pero es también muy sencillo de identificar.
Gruñido de relajación
Este gruñido es frecuente escucharlo en el perro al estirarse, cuando regresa de un paseo y se tumba por ejemplo si está cansado o cuando cambia de postura en su cama o colchón. Es también común cuando le acariciamos y está completamente relajado. A veces incluso aunque no esté dormido, puede hacer una especie de ronquido e incluso suspirar. Es un gruñido bajo y prolongado, y una buena señal de que tu perro se siente a gusto.
No todos los perros tienen por qué utilizar los distintos tipos de gruñido. Además, teniendo estos gruñidos más o menos identificados, podemos encontrar muchas variaciones. Algunos pueden usar más los ladridos o directamente los gestos físicos. La buena noticia es que aunque nosotros no seamos capaces de determinar cuál es el gruñido de nuestro perro (¡no es tan difícil! Sólo requiere un poco de práctica) otros perretes sabrán exactamente lo que quiere transmitir y cuál es su estado de ánimo cuando lo escuchen. Y no solo por el sonido, también por las circunstancias que lo rodeen y por supuesto por su comunicación corporal. Por supuesto, hablo siempre de perros que hayan tenido una buena socialización con otros perros y hayan aprendido cuáles son las señales para una buena comunicación canina.
Imagen:
Por Adam.J.W.C. (Trabajo propio) [GFDL undefined CC-BY-SA-3.0], undefined