El fallo del cual os vamos a hablar hoy, es un fallo que comete casi el 80% de las personas que pasean a su perro y es que no lo pasean, sino que lo ahogan de tal forma que al final no termina siendo un paseo, sino un infierno para el perro.
Muchas personas piensan que cuando el perro quiere ir detrás de otro o incluso para que vaya más rápido o aplicarle un correctivo, deben tirar de la correa. Entiendo que piensan que el cuello de su perro es de acero y no pasa nada si tiran de la correa, pero lo que en realidad está pasando es que lo estás ahogando.
Con esto no estamos diciendo que tengas que sacar a tu perro sin correa a la calle, ya que no pesamos que sea la mejor solución, no solo por la seguridad de las demás personas, sino por la seguridad de tu perro. Sin embargo, debes dejar que tu perro camine sin ahogarlo cada 5 minutos.
De hecho, como nota te comentamos que no son nada aconsejables los collares para perros que se colocan en el cuello, sino los que va alrededor del cuerpo, la razón es que puede que tú pasees a tu perro con todo el cariño del mundo, pero él puede tirar de la correa en cualquier momento y esos tirones pueden causar problemas oculares. Hace algunos meses el Journal of American Animal Hospital Association, sacó un estudio en el cual decía que cuando los perros usaban collar para pasear, eso incrementaba la tensión en sus ojos, lo que podía derivar en un glaucoma.
Otro estudio llevado a cabo por veterinarios en 1992, determinó que los perros que usaban collar para ser paseados y que entraron en el estudio ? alrededor de 400- tenían serias lesiones en la espalda, sobre todo en la zona del cuello.
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