Perros con discapacidad

Adoptar a un perro es una gran responsabilidad y si el perro tiene alguna discapacidad, esa responsabilidad es mayor aún.

Sin embargo, merecen tener una segunda oportunidad de ser adoptados y tener una familia que le quiera. 

Muchos perros nacen discapacitados, pero otros a causa de algún accidente o alguna enfermedad sufren de alguna discapacidad de un día para otro.

Sin importar el motivo o la causa de su discapacidad, merecen tener un hogar, amor, poder jugar y pasear como cualquier otro perro. 

Los perros, al igual que las personas, pueden padecer algún tipo de discapacidad como parálisis, ceguera, sordera, amputaciones, entre otras.

No obstante, no quiere decir que deban ser apartados.

Solo necesitan un hogar con mucho amor y cuidados. Un perro con discapacidad puede tener una vida feliz, si el humano se lo permite.

Muchos adoptantes desconocen que un perro discapacitado puede ser una gran compañía, como cualquier otro perro.

Un perro puede tener discapacidad física, auditiva y visual, que afectan a su calidad de vida pero, si se cuidan correctamente y se cubren todas sus necesidades básicas, todo saldrá bien. 

Perros con discapacidad

Perros sordos

La sordera en los perros es algo más común de lo que parece, pero no significa que un perro no pueda tener una buena calidad de vida.

La sordera puede aparecer total o de manera parcial.

Esta discapacidad, normalmente, se manifiesta a partir de que el perro cumple 10 años de edad. 

A pesar de que un perro no pueda oír, tiene otros sentidos muy bien desarrollados que lo ayudarán a seguir adelante: su vista y, sobre todo, el olfato.

Por supuesto, tener un perro sordo no es fácil al principio, todo es cuestión de adaptación y constancia para lograr que el perro siga con su vida normal, o lo más normal que se pueda. 

Un perro sordo necesita algunos cuidados:

Enseñarle al perro señas con las manos.

Vigilarlo cuando se encuentre en espacios abiertos.

Si salen de casa, el adoptante debe estar siempre a la vista del perro para que no se asuste ni se sienta solo.

En caso de que el perro se pierda, será más fácil recuperarlo si se le coloca en su collar que no puede oír. Así, si alguien lo encuentra, podrá ayudarlo a regresar a casa.

Es importante que a un perro sordo no se le toque por detrás. Puede asustarse. Lo mejor es colocarse de frente para llamar su atención.
Nota: Los perros son animales muy inteligentes, tanto así que, pueden aprender hasta 20 señas diferentes durante todo un año.

Por lo tanto, aunque un perro sordo no pueda escuchar a su adoptante, podrá comunicarse fácilmente.

Es importante que el adoptante utilice señas sencillas de entender, practicar con constancia, paciencia y mucho amor. Al final, todo valdrá la pena. 

Perros con ceguera

Muchos perros quedan ciegos por algunas enfermedades comunes en muchas razas. Algunas de esas enfermedades, son:

Atrofia de la retina.

Cataratas.

Glaucoma, entre otras.

Cuidados básicos para un perro ciego o con ceguera parcial

Cuando un perro es ciego o tiene ceguera parcial, el adoptante puede tomar algunas precauciones para que el perro esté más tranquilo y se adapte a su espacio. 

Acondicionar la casa:
Al tener en casa un perro con ceguera, es necesario que el adoptante tome ciertos cuidados.

Evitar que el perro tenga contacto con escaleras, barandillas, plantas, floreros.

La finalidad es que la casa sea segura para el perro. 

Mantener los objetos de la casa en el mismo lugar:
Si un perro ciego se acostumbra a andar por la casa con tranquilidad, es importante que todo permanezca en el mismo lugar.

Si el adoptante cambia algún mueble o sofá de sitio, podría provocar que el perro se tropiece.

Al principio, mientras se acostumbra, puede que sí se tropiece con muchos objetos de la casa, pero una vez se adapta, es mejor dejar todo igual por su seguridad. 

Por supuesto, es importante también que su comida y agua estén también siempre en el mismo lugar.

Paseos con correa:
Un perro ciego, para poder disfrutar del aire libre, debe siempre salir con correa.

No solo para evitar algún tipo de accidente o tropiezo, sino que de esa manera se sentirá más seguro y el adoptante también, al ser más fácil guiarlo. 

Nota: Si el perro es ciego por algún accidente o enfermedad, es decir, que es algo repentino, puede que sienta ansiedad al salir a la calle.

De ser así, es recomendable que se inicien con paseos cortos y muy cerca de casa durante las primeras semanas.

Mientras el perro se muestre más tranquilo y seguro, se pueden ir haciendo cada vez más largos. 

Hablarle antes de tocarlo:
Un perro ciego puede tener una buena calidad de vida, pero al principio puede ser algo difícil para todos.

Por eso, cuando es ciego, es importante que antes de tocarlo, se le hable.

Así no se asustará al sentir un toque o caricia, así como a un perro con sordera. 

Juguetes con sonidos:
Una recomendación para los adoptantes que tienen perros ciegos es que tengan juguetes que emitan algún sonido.

La finalidad es que el perro pueda desarrollar muy bien el sentido de la audición.

¿Cómo reconocer a un perro ciego o con problemas en la vista?

El perro se tropieza. 

Manifiesta dificultad para ubicar su comedero y su bebedero.

Tiene algunas manchas en sus ojos. 

Al salir de casa, camina con mucho cuidado.

No logra ubicar rápidamente el sonido de la voz de su adoptante. 

Los ojos lagrimean.

Perros con discapacidad física

Un perro con discapacidad física necesitará de una mayor dedicación por aparte de sus adoptantes, pero no mucho más de lo que tenga que necesitar un perro sin problemas de discapacidad.

Veamos los cuidados más importantes que necesitan:

Higiene:
Si un perro no puede moverse fácilmente o con normalidad, requiere que su adoptante cuide las partes afectadas y su higiene en general. 

Por ejemplo, si el perro se ensucia con su con su orina o heces. 

Muchos perros con discapacidad física, no logran controlar los esfínteres y por ello el adoptante debe estar atento a su higiene con frecuencia.

Para hacerlo, se pueden utilizar paños húmedos, toallitas de bebés o también gasas con suero fisiológico. 

Es importante saber que algunas sustancias pueden irritar la piel del perro.

En ese sentido, lo mejor siempre será consultar con el médico veterinario si hay dudas.

Otra opción, según la discapacidad del perro, es colocarle pañales, de ser así, es importante que se le cambie con frecuencia para evitar malos olores o alguna infección.

Cuando se opta por el pañal, el adoptante debe procurar que también esté algunas horas del día sin usarlo. 

Alimentación: 
La alimentación es uno de los puntos más importantes para el cuidado de un perro.

Una correcta alimentación, ayudará mucho a su recuperación. Para ello, es importante contar con la valoración de veterinario, quien podrá indicar con exactitud qué tipo de dieta necesita el perro. 

Un perro con alguna discapacidad física puede manifestar depresión, estrés o tristeza; por lo que comer no será fácil.

En ese sentido, el adoptante debe estar atento a cada una de sus comidas. Además, el no poder moverse bien, repercute notablemente en su alimentación.

Es muy importante que el perro se alimente bien, con todos los nutrientes que su cuerpo necesita para su salud.

Su dieta debe incluir:

Proteínas.

Minerales.

Vitaminas, entre otros.
Una correcta alimentación lo ayudará su estado de ánimo. Además de que le dará más fuerza y vitalidad al perro.

¡Cuidado con las infecciones de orina!

Cuando un perro tiene una discapacidad física, las infecciones pueden ser más recurrentes, sobre todo, las infecciones de orina.

Esto se debe a que los perros que presentan algún tipo de parálisis, pueden o no vaciar su vejiga correctamente.

Muchos perros que tiene parálisis manifiestan problemas para orinar.

Algunos no pueden controlarla y van dejando rastro de ello. Por lo tanto, no logran por sí solos, vaciar su vejiga. Es importante que el adoptante lo ayude a hacerlo.

Lo recomendable es tres veces al día para garantizar que quede vacía. Al tomar ese cuidado, se evitará que aparezca alguna infección urinaria. 

Para vaciar la vejiga, se debe hacer un poco de presión sobre ella con ambas manos. Palpar hasta tener ubicada la vejiga y hacer la presión, parar, apretar; y así sucesivamente hasta que no salga orina.  

El veterinario te enseñará a hacerlo correctamente.

Cuidado de su piel:
Como mencionamos en un punto anterior, si es necesario, el perro puede usar pañales diseñados especialmente para perros.

Sin embargo, es importante que su piel no se irrite. 

El adoptante debe revisar con frecuencia su pañal y cambiarlo cada vez que sea necesario hacerlo.

Si el perro hace alguna de sus necesidades, no debe pasar mucho tiempo con el pañal sucio. 

En cuanto al baño, si es con frecuencia, puede hacer que su piel se seque en exceso pero con productos adecuados, se podrá cuidar su piel.

Cuando un perro tiene alguna parálisis, puede que necesite baños frecuentes, de ser así, es mejor consultar con el veterinario para conocer qué tipo de producto puede usarse para que su piel esté cuidada como debe ser.

Sesiones de masajes: 
Los masajes ayudan a mejorar mucho la circulación de la sangre.

También son buenos para aliviar dolores.

Además, cuando un adoptante le practica un masaje a su mascota, el vínculo entre ambos se refuerza mucho más.

Un perro con parálisis no puede moverse bien y para ayudarlo a que sus articulaciones no se lastimen, las sesiones de masajes serán de gran beneficio.

Sesiones de terapia profesional:
Un masaje, como mencionamos en el punto anterior, es importante, pero la ayuda de un profesional, puede ayudar a un más al perro con su parálisis.

Cuando un perro no puede moverse, sus músculos pueden atrofiarse y para eso es importante la rehabilitación, que solo un experto debe practicar. 

Una excelente recomendación es el agua, debido a que nadar es una manera de que el perro se sienta bien. Además, al nadar, no sentirá dolor.

Evitar que el perro se lastime al arrastrarse:
El perro con parálisis puede presentar algunas heridas, debido a que no puede apoyarse correctamente y la manera que usa para trasladarse es arrastrándose.

En ese sentido, si aparece alguna herida, será difícil curarla, por lo que mejor es la prevención. 

Para ello es recomendable que el adoptante le coloque abrigos protectores, que ayudarán a que el perro no tenga contacto directo con el piso.

Otra opción es usar una silla de ruedas para perro que permitirá que el perro, aunque tenga parálisis, puede moverse tranquilamente.

Es sin duda, un elemento que todo adoptante debe ofrecerle a su perro, si tiene parálisis.

Son ideales para que le perro no apoye las patas de atrás y use las del frente para moverse. Si ese es el caso, debe conseguir una, será algo muy beneficioso para el perro y para toda su familia. 

Con la silla, el perro tendrá mayor calidad de vida y podrá realizar los paseos que para todo perro es más que imprescindible.

Recordemos que un perro necesita caminar un poco, oler, ver a otras personas y animales.

Por supuesto, al ser un perro con parálisis, no se debe olvidar el uso de su silla de ruedas para que pueda movilizarse y tener un paseo lo más normal y feliz que se pueda. 

Los arneses también son perfectos para perros con algún tipo de discapacidad o parálisis.

Algunas causas de las parálisis en los perros

Los perros que tienen parálisis, según la causa, podrían o no recuperarse con el paso del tiempo.

Enfermedades: algunas enfermedades como la artrosis, hernia, displasia, entre otras, afectan mucho las capacidades de movimiento de un perro. 

Operaciones: cuando un animal es sometido a una cirugía, accidente o fractura, según la gravedad, podrá no recuperar la movilidad. 

Conclusión

Los perros son sin duda el mejor amigo del hombre con o sin discapacidad. 

Cuando una familia o una persona decide adoptar a un perro, debe ver más allá del problema físico que ese perro pueda tener.

Pensar que se le dará otra oportunidad de ser feliz, que será un miembro más de la familia y que les dará mucha alegría, será lo más importante para decidir esa gran responsabilidad que significa adoptar.